Ciudad

no quieren volver al sistema manicomial

Con la salud mental no se jode

Organismos provinciales y municipales cuestionaron el proyecto de reglamentación de la ley que modifica aspectos sustanciales de la normativa vigente. En la Legislatura está en tratamiento la creación del órgano de revisión.


Las áreas de Salud Mental de la provincia y el municipio adhirieron al fuerte y masivo rechazo de profesionales y organizaciones de todo el país al proyecto de reglamentación de la ley de Salud Mental Nº 26.657, que modifica aspectos sustanciales y que está para la firma presidencial.

“Desde la Provincia de Santa Fe exigimos el tratamiento en el marco del Consejo Federal de Salud (Cofesa). Durante las reuniones de los anteriores Cofesa, las autoridades nacionales insistieron en respetar la voz de las distintas jurisdicciones. Somos las provincias las encargadas de la implementación efectiva de las políticas de salud”, dijeron a través de un comunicado.

“Rechazamos la posibilidad de modificación con el contenido de los trascendidos y apelamos a ser convocados a discutir cualquier propuesta de modificación, más aún cuando esto implica un retroceso a lo ya logrado o conquistado”, refirieron.

El jueves la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad un proyecto de declaración del diputado Jorge Henn para pedir la intervención del Ejecutivo provincial ante los organismos nacionales y mantener la reglamentación de la actual ley.

El legislador radical indicó: “Estamos ante un hecho que presenta dos situaciones alarmantes. En primer lugar, la nueva reglamentación desvirtúa el sentido de la ley aprobada en 2010 y les quita derechos a las personas con padecimiento mental. En segundo lugar, el tratamiento por decreto suplanta la discusión propia del Congreso Nacional, que es el ámbito adecuado donde corresponde que se traten estos temas”.

Desde el gobierno provincial recordaron que se ha presentado en la Legislatura el proyecto de la creación del Órgano de Revisión Provincial, previsto en el cuerpo mismo de la ley 26.657, que fue elaborado por convocatoria de la dirección provincial de salud mental y construido durante tres años en ámbitos que incluyeron instancias institucionales, intersectoriales, movimientos de usuarios y trabajadores, movimientos sociales, organizaciones de usuarios y familiares, instancias académicas e intercambios con especialistas y expertos del campo de la salud mental nacional e internacional. El proyecto está a consideración de comisiones en Cámara de Diputados de Santa Fe.

El decreto que modificaría la ley propondría retornar al sistema manicomial, lo que entienden desde la provincia y el municipio como un retroceso en los estándares de Derechos Humanos internacionales para las personas que sufren padecimientos subjetivos. “Avanzamos con la atención en la salud pública, seguimos con la desmanicomialización e implementamos tratamientos comunitarios y ambulatorios”, dijeron en el comunicado.

Para las autoridades, la internación es un recurso terapéutico de última instancia y debe darse en los hospitales generales. “Antes debe abordarse de forma integral e interdisciplinaria en conjunto con el usuario y sus referentes afectivos que reconoce la complejidad de las situaciones”, explicaron.

Recorrido

Siempre, según contaron las autoridades, a través de un informe al que accedió El Ciudadano, la ley fue construida a partir de años de debates, acuerdos, experiencias innovadoras, transformaciones en las prácticas profesionales y la creación de dispositivos que apuntan al abordaje del sufrimiento subjetivo en todas sus dimensiones. La ley nacional y la provincial (N° 10.772) establecen un modo de entender la salud mental como un proceso determinado por componentes históricos, socioeconómicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a la concreción de los derechos humanos y sociales de toda persona.