Al trotecito y sin despeinarse. Así se impuso la Selección Argentina sobre Venezuela en su última presentación como local por las Eliminatorias Sudamericanas. Lo abrió Nicolás González en la primera parte y una ráfaga del ingresado Di María sobre el final sentenció el 3-0 para que la Scaloneta estire su racha de partidos sin conocer la derrota y siga sumando confianza de cara al gran objetivo: el Mundial que se celebrará a partir de noviembre en Qatar, donde ya tenía asegurada su clasificación hace rato.
La Albiceleste dominó siempre el trámite del juego ante el prolijo y voluntarioso equipo al mando de José Pekerman, quien se llevó una merecidísima ovación de cada rincón de la Bombonera. La Vinotinto nunca fue rival para Argentina, que tocó tranquilo la pelota confiado en que el gol tarde o temprano iba a llegar. Y así fue.
Messi encaró por el medio a toda velocidad como en sus mejores épocas y si bien la jugada se ensució, una rápida recuperación permitió el veloz ingreso por derecha de Rodrigo de Paul, quien cedió al centro para que Nico González de arremetida la empuje al gol.
Con eso bastó para desarmar al rival. Y fue por más Argentina, que buscó seguir festejando con su gente por la clasificación al Mundial, la obtención de la Copa América e incluso por el buen presente que atraviesa el elenco conducido por Lionel Scaloni, quien aprovechó el duelo con la Vinotinto para darle rodaje a jugadores con poca participación en la Selección, como el caso de Alexis MacAllister o Joaquín Correa.
Argentina volvió a ratificar que es un equipo tan voraz como comprometido con la causa: todos corren, todos meten y todos juegan, los que salen de entrada y los que entran desde el banco.
La próxima jornada será con un viaje a Guayaquil para enfrentar a Ecuador en la 18ª y última fecha de las Eliminatorias, ya con los cuatro primeros lugares de la tabla definidos: Brasil, Argentina, Ecuador y Uruguay irán de manera directa. Perú, Colombia y Chile sueñan con el repechaje.
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