“Acabo de llegar del Hospital Posadas, me atendieron, no sabes cómo estoy, estoy re mal, no sabes lo que yo vi en el Hospital, no sabes… no sabes lo que me entere en la reunión, vos sabes hay tres pisos llenos de coronavirus y no lo quieren decir a nadie porque es un Hospital Nacional”.
El audio, que fue subido a Youtube en un video con una foto del hospital Posadas de la localidad bonaerense de El Palomar, llegó a casi 150 mil reproducciones. El contenido, claramente falso, motivó que el jefe del centro de salud realizara una denuncia, la cual fue tomada por la Justicia Federal, que comenzó a investigar la fake news bajo la carátula de intimidación pública. El pasado 6 de abril, un hombre del porteño barrio Once fue detenido como artífice de la calumnia, y será indagado en las próximas horas, publicó el portal fiscales.gob.ar.
La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por el interventor del Hospital Nacional Posadas, Alberto Alejandro Maceira. La Fiscalía Federal Nº1 de Morón constató la existencia del video que alertaba, con un relato falso, sobre una supuesta situación de colapso por coronavirus, “difamando así el servicio de salud nacional que se presta” en el Posadas.
Para comprobar la denuncia, la dependencia a cargo del fiscal federal Santiago Marquevich dio inicio a una Investigación Preliminar (IP) y se solicitó la colaboración de la División Delitos Tecnológicos de la Policía Federal.
“(…) Hay cualquier cantidad, es una pandemia ya…y la gente no sabe nada Nati, tengo que decirlo en la reunión. Mostrarles mi grabación (…) no puede ser, no puede ser que la gente se muera de virus sin decir nada (…) hacéles escuchar este audio a todos, necesito que todos lo sepan y lo difundan, porque nadie dice nada, pero yo lo vi con mis ojos Nati, yo lo vi con mis ojos”: la fake news en cuestión registraba 144.989 visualizaciones y que el canal, determinaron los detectives informáticos, era una continuación de otro que habría sido cerrado con anterioridad por Google, también a raíz de publicaciones falsas.
Graves consecuencias
Así las cosas, fuentes judiciales dijeron que el fiscal Marquevich envió un pliego interrogatorio al interventor del Posadas a fin de que se explaye sobre la situación sanitaria actual del hospital, recursos humanos y materiales disponibles, las medidas adoptadas como consecuencia de la pandemia COVID-19 y posibles repercusiones internas y externas que la publicación y difusión masiva del video pudo traer aparejado.
En su respuesta Maceira ratificó la denuncia inicial y a las preguntas formuladas por la Fiscalía contestó que “al momento de tomar conocimiento de la falsa noticia denunciada, se encontraba internada una sola paciente aislada por cuyo resultado del test fue positivo. Lo indicado en la publicación respecto que existen pisos enteros con casos de coronavirus es totalmente falso.
Además el funcionario describió las graves consecuencias que la difusión de la noticia falsa había generado en el servicio de salud brindado por el hospital: “el personal del nosocomio se mostró preocupado por el peligro que implica una situación como la denunciada, máxime para los trabajadores (…) El público en general que se atiende en el hospital se interesó en saber si lo publicado era cierto y si debían tomar algún tipo de prevención al venir al hospital, preocupándose aquellos que se habían atendido en esos días en el hospital por temor al contagio (…) Otra grave consecuencia que provocó esta falsa denuncia radicó en el hecho de que muchos de los donantes de sangre que concurrían al Hospital para efectuar la misma dejaron de hacerlo por el temor que originó en ellos la publicación. La campaña de donación de sangre se vio afectada. Mantener el banco de sangre funcionando en el hospital resulta imprescindible en estos tiempos”.
Identificación y allanamiento
Los investigadores se abocaron al análisis de la publicación falsa y lograron individualizar a su presunto responsable e identificar su perfil de Facebook. Se trata de un hombre mayor de edad con domicilio en el barrio porteño de Once: Santiago A., vecino de Balvanera. Tras verificarse su domicilio, el juez Néstor Barral hizo lugar al pedido de Marquevich y ordenó el allanamiento de la vivienda donde se encontró al investigado y se lo notificó de la causa en su contra, de sus derechos y se secuestró la notebook que tenía consigo, desde la cual habría subido el video intimidatorio con la noticia falsa.
El magistrado también hizo lugar al pedido de la fiscalía de recibirle declaración indagatoria al imputado, cuando la situación coyuntural lo permita, por el delito de intimidación pública previsto y reprimido en el artículo 211 del Código Penal. En su requerimiento, el fiscal justificó la medida y calificación legal sosteniendo que debía valorarse el especial contexto de pandemia que se vive a nivel nacional y mundial: “En lo que concierne a los efectos de dicha publicación, es decir la capacidad de infundir temor o provocar tumultos y/o desórdenes, merece destacarse el especial contexto –nacional y mundial- en el que dicha publicación es divulgada (…) Frente a ese panorama, la divulgación de información por canales abiertos a la comunidad y que registran elevados niveles de audiencia dando cuenta de un estado crítico y caótico que acontece en el Hospital Nacional de mayor envergadura e importancia en la zona y respecto del fenómeno que azota al mundo, cobrándose gran cantidad de vidas a diario, son por demás demostrativos de la capacidad de producir los efectos a los que hace referencia el tipo penal en análisis”.
Maquevich requirió a las empresas Google y Facebook que preserven el video subido por el imputado al canal YouTube con toda su información y publicaciones vinculadas. En los próximos días, cuando la situación lo permita el juez barral recibirá indagatoria al imputado, publica Fiscales.
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