Policiales

Capo del Fonavi de Parque Oeste

Clan Abregú: indagan a policía y cuatro familiares de Dulce

Se sumaron en las últimas horas a otras cinco personas que habían sido detenidas en octubre pasado, cuando la PSA desarrolló 17 allanamientos que, al decir de la pesquisa, permitió desbaratar la banda, acusada de acopiar, distribuir y comercializar cocaína y marihuana. El líder, Dulce, sigue prófugo


En los allanamientos de octubre hallaron ladrillos de cocaína escondidos en el dormitorio de uno de los familiares del Dulce.

Un suboficial que pertenece a la Policía de Investigaciones (PDI) fue apresado este miércoles en el marco de la causa federal que investiga al clan Abregú dedicado a la venta de estupefacientes y que el mes pasado fue desbaratado tras 17 allanamientos. La detención la llevó adelante el personal Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) bajo las órdenes de la Fiscalía Federal N° 2, a cargo de Claudio Kishimoto. El apresado, de 44 años, fue indagado este jueves por el magistrado Marcelo Bailaque, titular del Juzgado Federal 4 y negó la acusación de la Fiscalía federal. Además, otros cuatro familiares del líder, Walter “Dulce” Abregú quedaron detenidos y serán indagados este viernes, indicaron fuentes judiciales.

El 23 de octubre pasado, la PSA llevó adelante 17 allanamientos que hicieron blanco en el Fonavi del Parque Oeste, bastión del clan liderado por Dulce Abregú, quien logró burlar el operativo y esfumarse. En los procedimientos, no sólo descubrieron una cocina de cocaína sino que volvió a surgir el nombre del célebre guitarrista narco Ramón “Campito” Ghiglione como proveedor de pasta base de cocaína de la banda.

En estos operativo también apresaron a los padres de Dulce, bajo acusación de ser parte de una organización dedicada de acopiar, distribuir y comercializar cocaína y marihuana. También quedaron presas otras tres personas, y se allanaron celdas en las cárceles de Piñero, donde están los hermanos del sindicado jefe de la banda, Damián, apodado Mafia, de 37 años, junto con Cristian, conocido como Pato, de 42, y en Coronda, en la cual está alojado Campito.

Si bien la causa se encuentra hermética, porque aún restan medidas de prueba, una fuente del caso contó que, en los allanamientos de octubre pasado, las fuerzas federales habían realizado un operativo en la vivienda del uniformado de la PDI, identificado como Mariano L. En ese momento no quedó detenido hasta esta semana cuando la Justicia federal dictó su captura.

En la indagatoria de este jueves ante el magistrado Bailaque, el policía negó la acusación del fiscal, quien le achacó pasar información sobre los operativos que se realizaban a la banda del Dulce.

Además, se realizaron nuevos allanamientos por parte de la PSA en el Fonavi de Parque Oeste –histórico bastión del clan– donde quedaron detenidos una hermana del Dulce, su pareja, su suegra y su cuñado, por estar sindicados como parte de la banda dedicada a la venta de estupefacientes. Voceros de la pesquisa indicaron que este viernes serán indagados por el magistrado Bailaque.

La pesquisa

En abril de 2014, personal de la PSA inició una serie de tareas de inteligencia criminal a pedido de la Fiscalía Federal N° 2 y la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), coordinada por Diego Iglesias, para corroborar el dato de un informante que aseguraba que ciertos domicilios de la ciudad serían las bases de operaciones de una importante organización narco.

Es así que se desarrollaron numerosas vigilancias tanto activas como fijas, se tomaron registros fotográficos, fílmicos y se analizó lo recolectado de las escuchas telefónicas de 25 líneas del barrio Fonavi de Parque Oeste, lo que permitió identificar a Walter Abregú, de 40 años y conocido como Dulce o Narigón, como líder de una extensa banda criminal y sus otros integrantes, compuesta en su mayoría por sus familiares directos, dijeron en dicha oportunidad desde el Ministerio de Seguridad de la Nación.

En la segunda línea están los cinco hermanos de Dulce, uno de ellos apodado Mafia, quien actualmente está detenido en Piñero donde cumple condena por homicidio. Éstos se encargaban del almacenamiento y la comercialización del estupefaciente. Al igual que su padre y su madre, quienes fueron detenidos en los operativos de octubre pasado luego de se encontrara una cocina de droga en su domicilio.

Dulce Abregú les confiaba la comercialización a familiares directos o conocidos y amigos de la familia, sostiene la pesquisa. Su pareja participaba de alguna u otra manera en la organización, al igual que su cuñado y su yerno. A la fila de vendedores se le suman un hombre conocido como Secuestro, quien también fue detenido, junto a su pareja apodada Pocha y otros dos hombres.

En tanto, la suegra de Dulce acopiaba el dinero recaudado y parte de la sustancia a distribuir, afirman los investigadores.

Además, el jefe tenía un testaferro para no quedar expuesto y para saber dónde vender conseguía información directa de un oficial de la Policía de la provincia de Santa Fe, quien tenía la función de informante, según se desprende de la investigación de la Fiscalía. Para los investigadores, Mariano L. era esa persona.

De la pesquisa también se pudo obtener que Dulce le compraba pasta base para cocinar el clorhidrato de cocaína al célebre Campito Giglione, hoy preso en Coronda, donde cumple condena por narcotráfico. Veinte años atrás este hombre se hizo conocido en las crónicas policiales como el guitarrero narco de la Villa del Tanque. Ahora, según la pesquisa, Campito vendía droga a través de su pareja, una mujer que también fue detenida durante los allanamientos.

El Juzgado Federal N° 4 de Rosario, a cargo de Bailaque, analizó toda la información recolectada de las tareas de inteligencia y dispuso el 23 de octubre último el allanamiento de 15 viviendas de la ciudad y las dos celdas penitenciarias de las unidades mencionadas anteriormente.

El resultado: se detuvo a los padres de Dulce, a los cuales se les encontró droga fraccionada y una cocina montada para las operaciones en su casa de Ceresetto al 6700, en la zona sur. Los otros tres detenidos cumplían distintos roles en la banda: comercializaban, acopiaban y distribuían las sustancias entre los clientes, informaron fuentes oficiales.

En total, se incautaron más de 1.400 dosis de cocaína, 125 de marihuana, un frasco pequeño de pasta base, 25 semillas de cannabis sativa, balanzas digitales, elementos de corte, precursores químicos, una prensa, cuatro moldes de hierro (para sellar los panes), 41 teléfonos celulares, notebooks, computadoras, tres autos, una moto y más documentación. Además, se secuestraron 179.000 pesos en efectivo y un puñado de dólares.

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