Los choferes de las líneas interurbanas de Rosario y Gran Rosario siguen reclamando seguridad en horario nocturno, producto de los sucesivos asaltos que vienen sufriendo. Además, denuncian a las empresas de descontar del sueldo de los trabajadores el dinero robado.
“Encima de tener que sufrir asaltos y arriesgar la vida, los choferes de colectivos deben reponer el dinero robado con sus sueldos y nadie dice nada”, dijo el secretario general de la Asociación de Obreros de Transporte Automotor (Aota), Alberto Montenegro a El Ciudadano.
Los trabajadores nucleados en ese gremio pidieron una audiencia con el ministro de Seguridad de la Provincia, Raúl Lamberto, para solicitarlo que entre las 21 y las 5 haya un policía en casa colectivo.
“Sabemos que las empresas están en condiciones de pagar un adicional para mejorar nuestra seguridad”, indicó Montenegro. Y continuó: “Hubo compañeros golpeados, baleados y nadie se enteró, si habría un policía en el coche esto no pasaría”.
El secretario gremial de Aota indicó que descartan la idea de realizar un paro, ya que estarían “perjudicando a un montón de trabajadores”.
Además, los choferes propusieron retirar el dinero de los coches y que el pago se realice mediante una tarjeta prepaga. “Esto debería implementarse fundamentalmente en los colectivos interurbanos”, manifestó Montenegro.
Asimismo, el mapa del delito en el horario nocturno descripto por Aota comprende los barrios 7 de septiembre, Las Flores, Godoy, Santa Lucía, la zona de Grandoli y Gutierrez en Rosario y la vecina localidad de Villa Gobernador Gálvez.
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