Espectáculos

Este viernes

Chango Spasiuk: “No entender a la cultura como alimento provoca un vacío ético y moral en el país”

El destacado compositor misionero presentará su placa “Eiké!” en Rosario. En ese marco habló acerca de cómo fue crear una producción tan intimista cuando predomina la virtualidad y sostuvo: “A los jóvenes hay que enseñarles a enamorarse de intentar y no del fruto de las acciones”


Mate con cedrón y una canción de Luis Alberto Spinetta de fondo es la imagen y sonido de un momento de descanso del Chango Spasiuk entre notas, ensayos y conciertos. En diálogo con El Ciudadano el compositor adelantó cómo será el concierto que lo traerá este viernes a Rosario para presentar su nuevo disco, Eiké!, entrar en el alma, pero también destacó la importancia de que la cultura en general debe estar al alcance de todos y todas, de la paciencia y respeto a sí mismo que deben tener las y los jóvenes artistas y dijo con firmeza: “El que no entiende que la cultura es también un alimento, está provocando un vacío ético y moral en el país”.

Eiké!, entrar en el alma, es un material que Spasiuk realizó con todos sus sentidos, precisamente con la intención de ir más allá de lo que había hecho hasta el momento. Fue animarse a conectar con sus sentidos, con sus espacios, con el encierro y la incertidumbre que experimentó (como muchos) durante la pandemia, e invitar a otros grandes artistas a los que admira a formar parte de su proyecto. En medio de la era de la virtualidad, y ante la invitación de entrar en su alma, el artista expresó: “La pantalla o las redes han sido una vía de conexión en esos tiempos y los siguen siendo. Son herramientas para acceder a muchas cosas, pero sé muy bien, y el público también, que el vivo hace a una atención sostenida colectivamente y eso es lago muy bello. El frente a frente es irreemplazable”.

Por otro lado, relató cómo fue ese proceso de creación y el sumar otros instrumentos,  los de sus artistas más admirados. “Ya el aprender a hacer un disco solo y en casa fue todo un desafío, pero luego, al animarme a darme ese gusto de compartirlo con gente que admiro y quiero mucho, fue otro gran paso. Porque yo siempre quise, y tenía en agenda, hace algo con alguna trompeta, con un laud”, recordó y agregó: “Claro que ahora sería imposible poder disponer de la agenda de  tanta gente hermosa, pero en aquél entonces estábamos todos encerrados y con ganas de compartir nuestro arte y ellos además, cada uno de ellos, fueron tan generosos conmigo que me dijeron sí de inmediato”.

Además, confesó: “No siempre salen los resultados esperados, incluso tengo en mi archivo un montón de cruces con otros artistas y formas que no salieron bien y bueno, es la vida misma. Pero en este caso la devolución de cada uno fue superadora”.

“la gente puede pensar que como tengo una trayectoria todo me sale bien y no es así, yo también dudo, pienso. Mi vida no es diferente a la de quien lee esta nota, se dedique a lo que se dedique. La cuestión está en seguir intentando, porque siempre se aprende”, dijo y recordó una frase de Benjamin Franklin, a quien un periodista le preguntó “qué sentía al haber fracasado 90 veces al inventar la lámpara”, a lo cual Frankling respondió: “No fracasé, es un experimento que llevó más de 90 pasos”.

“Es con lo cual deben trabajar y luchar los jóvenes que viven de la inmediatez. Nada realmente verdadero sucede inmediatamente, aunque muchos llevan hoy proyectos que son sumamente exitosos y hay que sostenerse en el camino. Lo importante es poder enamorarse de intentar y no del fruto de las acciones. Hoy veo que muchos cuelgan los guantes y dicen «esto no es para mí» o «yo no nací para esto». No se trata de eso, sino de intentar, de probar y de arrancar todos los días”, aconsejó.

Cultura para todos y todas

Consultado sobre qué disfruta hacer en su tiempo libre, Spasiuk suspiró, relajado, y comentó que gracias a su programa radial en Radio Nacional (Enramada, los sábados de 9 a 10) pudo escuchar música muy variada en los últimos años y hasta leer autores que desconocía. “Me encanta la lectura, en casa tenemos una biblioteca muy grande y siempre estamos comprando libros, porque somos de leer mucho, tenga que ver con la música o no, simplemente me enriquece hacerlo”, dijo y recordó que uno de los últimos trabajaos que leyó fue una investigación sobre la música de Daniel Baremboin. “En cuanto a música –continuó-, en casa hay mucho de los Beatles, de Spinetta, de Yupanki, de Piazzolla o Mozart, y no necesariamente todo lo que escuche lo llevo a mis proyectos, pero algo que disfruto mucho hacer”.

“Uno trabaja todos los días para comer y la comida diaria que tenemos también es la belleza o la cultura. Lamento que muchos no piensen así, que no entiendan que el país se construye con otras herramientas. Es así como hacen en el país un enorme agujero, un vacío ético y moral. Acá no se necesita que la cultura sea sólo para especialistas, debe ser para toda la gente, como alimento a su alma, a su educación”, señaló y continuó: “Mi padre, por ejemplo, era carpintero, y nunca se atrevió a leer a Borges porque no le correspondía. Todo lo contrario, el arte enriquece, el arte da vida”.

Pero eso no es todo: la gran compañía de cada momento creativo o de ocio de Spasiuk es el mate. “El mate es mi gran compañero. Es rico de cualquier manera, aunque por estos días le estoy poniendo un poco de cedrón. Tengo un porongo así que trato de no mezclar la yerba con nada más porque si no queda el gusto impregnado. Pero cuando tengo ganas de unas cascaritas de naranja elijo uno de esos modernos, de vidrio, como para pasar un rato diferente”, compartió.

Sobre Eiké!, su nuevo disco

El material que presentará Spasiuk en la ciudad marcó un antes y un después en su carrera. Desde grabarlo en la soledad plena, durante la pandemia, inmerso en el encierro de su casa, cuando para él sólo se grababan discos en un estudio, luego pasar por animarse y darse el gusto de invitar a grandes artistas del mundo a participar de la placa, y que aceptaron gustosos, a disfrutar tiempo después del “cara a cara” con la gente, en un encuentro marcado a fuego por las emociones y los aplausos, este cantante y compositor misionero señaló: “La gente está muy conectada con este viaje musical, incluso diferente a lo que suelo hacer. Y con este «entrar en el alma» planteo la música desde un lado constructivo, porque muchos piensan que la música es solo un momento de evasión, distracción y entretenimiento, pero es realidad este proyecto es algo mucho más amplio, filosófico y metafórico en su esencia”.

El disco se encuentra disponible desde abril en plataformas digitales, y cuenta con una nueva versión de “Pynandi” junto a Gustavo Santaolalla y el español Carlos Nuñez, “Mi pueblo, mi casa, la soledad”, junto al brasileño Jaques Morelembaun, además de la participación de artistas y músicos invitados como Sixto Corbalán (Paraguay), Erik Truffaz (Francia), Per Einar Watle (Noruega), Steinar Raknes (Noruega), Boubacar Cissoko (Senegal, África) y Majid Bekkas (Marruecos).

En tanto, en medio de los 4 conciertos con los que los presenta en el país, Spasiuk adelantó que a Rosario llegará junto a Sixto Corvalán, Franco Luciani, Marcelo Dellamea y el pianista Rodrigo Sosa, además del ensamble que acompaña al misionero. “Ellos no sólo tocan de invitados y las canciones que grabaron, saino que van a pder ver todo un cruce de repertorio, una combinación hermosa entre canciones de Spinetta con el arpa paraguaya o «Libertando» con la quena”.

Para agendar

Chango Spasiuk presentará su disco Eiké! Entrar en el Alma este viernes, desde las 21, en el Teatro Astengo, de Mitre 754. Las localidades, desde 5 mil pesos, se obtienen en boletería y en Tuentrada.com

Comentarios

10