La tarde del 15 de abril, Thiago Avaca, un niño de 9 años, murió al recibir un disparo en la cabeza mientras jugaba a la PlayStation con amigos en una vivienda de las inmediaciones de Lamadrid al 1600, en barrio Tiro Suizo.
Las primeras versiones hablaron de un tiroteo, pero con el correr de las horas la investigación determinó que el niño falleció a raíz de un accidente que se originó en la misma pieza donde estaba reunido. Uno de sus compañeritos encontró un arma en una mochila y al manipularla, abrió fuego sobre Thiago, según estableció la División Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
Desde entonces un familiar de los dueños de esa vivienda se encontraba con pedido de captura, ya que se cree que, luego de la tragedia, escapó de la casa y se llevó el arma. Este miércoles, fue detenido en San Lorenzo.
Se trata de Pablo G., de 37 años, sospechado de haber dejado el arma en la pieza donde Thiago y sus amigos se reunieron. Según informaron fuentes policiales, el hombre fue detenido en un allanamiento que tuvo lugar este miércoles en Díaz Vélez y la costanera de San Lorenzo.
Allí la Policía buscaba a un sospechoso de atacar a balazos el frente de una vivienda de Díaz Vélez al 4000 el pasado lunes. Este hombre, Jonathan R. quedó detenido a pedido del fiscal de San Lorenzo Leandro Lucente, pero en la misma casa estaba Pablo G., y cuando consultaron sus datos, la central arrojó que tenía un pedido de captura por el caso de Thiago.
Fuentes judiciales indicaron que la fiscal de Homicidios Marisol Fabbro, que instruyó el caso de Thiago antes de que sea derivado a la Justicia de Menores, imputará este viernes a Pablo G., por el delito de portación ilegal de arma de guerra.
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