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Cayeron in fraganti mientras vaciaban un local de ropa

Una vecina vio al trío de ladrones cargando mercaderías en un auto y llamó a la Policía, que llegó enseguida.

Ladrones ruidosos, una vecina desvelada y la rápida llegada de la Policía fue el cóctel perfecto para que el dueño de una pilchería de la zona sur recuperase la mercadería robada durante la madrugada de ayer. El hecho ocurrió poco antes de las tres, cuando tres muchachos que “cargaban” todo tipo de prendas en un Renault 12 estacionado frente al negocio Look, mirá tu onda, ubicado en Regimiento 11 al 60, fueron sorprendidos por un móvil policial. De inmediato emprendieron una huída a toda velocidad, y tras una persecución de dos cuadras fueron detenidos dos de los ladrones, ya que el tercero se tiró del auto en movimiento y desapareció en la noche.

Una cadena de eventualidades cambió la suerte de los ladrones que durante la madrugada de ayer barretaron la puerta de ingreso del local de ropa y alcanzaron a cargar casi la totalidad de la mercadería en bolsas de consorcio que subieron al Renault 12 azul en el que habían llegado.

Pero una vecina de la zona que se quedó levantada hasta bien entrada la noche para ayudar a estudiar a uno de sus hijos escuchó ruidos extraños y el motor de un auto. Según relató a El Ciudadano, antes de que su marido se acostara le comentó esa situación, pero ambos pensaron que se trataba de sonidos propios de la recolección de basura.

Sin embargo, un rato después la vecina escuchó el estallido de un vidrio y volvió a preocuparse. Su marido ya estaba dormido, por lo que decidió enfrentar la situación sola y se asomó a la vereda a ver lo que ocurría.

“Era un pasamanos”, dijo la mujer tras explicar que un muchacho estaba dentro del local, le pasaba las bolsas a otro en la vereda, que a su vez se las alcanzaba al que estaba al lado del auto y las cargaba en el vehículo. Tras constatar que se trataba de un robo y sin perder tiempo, la vecina dio aviso a la Policía, que arribó al lugar en menos de diez minutos.

El primer móvil policial llegó en contramano por calle Regimiento 11 y bloqueó el paso del auto, en el interior del cual se habían amontonado los tres desconocidos junto a los bolsones de ropa.

Los escruchantes intentaron huir por esa calle, por lo que el móvil policial debió retroceder unos metros e inició una persecución que finalizó en Anchorena y Castrobarros, a unas dos cuadras del lugar, cuando el auto fugitivo perdió la estabilidad y reventó un neumático contra la vereda.

Claudio V., de 27 años, y Andrés R., de 26, fueron detenidos por los efectivos de la comisaría 11ª, que tiene jurisdicción en la zona, mientras que un tercer hombre se tiró del auto en movimiento en plena huída y se perdió en la noche. Fuentes policiales indicaron que el fugitivo no fue identificado y que ninguno de sus dos cómplices quiso declarar en sede policial.

Tras atrapar a los sospechosos, la Policía volvió al lugar del hecho, adonde se acercaron al menos cinco patrulleros. Los vecinos –que aseguran que es un barrio inseguro por la cantidad de robos que hay en la zona–, destacaron el actuar policial.

“Nunca actuaron con tanta rapidez”, dijo una vecina ayer al mediodía, a la hora en que salen los chicos de la escuela y que la calle es casi intransitable. Es que el local escruchado queda justo entre el jardín de infantes y la escuela primaria “Nuestra Señora de la Merced”, y el vidrio roto de la puerta de ingreso generó la curiosidad de decenas de niños.

En el mismo sentido se expresó Sebastián, un hombre de 30 años y dueño de la tienda, quien manifestó su profundo agradecimiento al accionar policial. “Recuperamos el 90 por ciento de lo sustraído y hay dos detenidos”, resumió.

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