Región

Riesgo de dos toneladas

Carne podrida: La Anónima de Venado Tuerto pagó inédita multa de 20 millones de pesos y reabrió

La cadena de supermercados había sido clausurada tras comprobarse la existencia de medias reses y costillares no aptos para consumo. El intendente Leonel Chiarella informó que parte de lo que ingrese por la sanción económica será para comprar mil test de covid-19


La sucursal del supermercado la Anónima de Venado Tuerto fue clausurada a principios de mes al descubrirse medias reses y costillares en mal estado en el local. Este miércoles, aceptó pagar una multa de 20 millones de pesos y reabrir con un refuerzo de las medidas de seguridad alimentaria. El Municipio de la localidad santafesina adelantó que utilizará parte del dinero para comprar test de coronavirus.

La jueza del Tribunal de Faltas local, Janina Ferreyra, había convocado a una audiencia para resolver el conflicto abierto con la sucursal de La Anónima, que integra una cadena nacional propiedad de la familia Peña-Braun, que fue clausurado preventiva tras un operativo de control municipal realizado el pasado 6 de abril luego de viralizarse imágenes de medias reses en estado de putrefacción. Comprobaron la existencia de dos toneladas de carne no aptas para el consumo.

Echale la culpa a los empleados

Al final había dos toneladas de carne podrida en súper de los Peña-Braun, ex funcionarios macristas

La Anónima admitió la seria irregularidad sanitaria pero en un comunicado dirigido a sus clientes de Venado Tuerto, pero descargó toda la responsabilidad en algunos “empleados negligentes” y pidió un recurso de revisión ante el cierre de sus instalaciones. En la audiencia respectiva, se le fijó una multa económica de 20 millones de pesos que fue aceptada por la compañía. Ante el acuerdo, el levantamiento de la clausura quedó sellado en un acta del Tribunal de Faltas.

“La empresa abonará el monto económico de la multa y se comprometió a cumplir con una serie de medidas preventivas que deberá adoptar el supermercado para su reapertura”, informó la jueza de Faltas Ferreyra. El monto de la sanción económica es inédito en la ciudad.

Desde la Patagonia

 

La Anónima inició sus actividades a principios del siglo XX en el sur del país como Sociedad Anónima Importadora y Exportadora de la Patagonia. Se fue expandiendo geográficamente y en Santa Fe, además del venadense, tiene espacios comerciales en Esperanza, Rafaela, Rufino, San Jorge y San Justo. Entre sus principales accionistas históricos se encuentran miembros de las familias Braun, Menéndez y Reynal.

Tras la audiencia de este miércoles, la boca de expendio en Venado Tuerto abrió nuevamente sus puertas este jueves tras cumplimentar documentación y demostrar que se adecuó a todos los protocolos de seguridad e higiene para la manipulación de alimentos, tal la exigencia del acuerdo.

El reinicio de las actividades fue de 7 a 8 en horario exclusivo para mayores de 60 años, y de 8 a 17 para todo público.

Multa para coronavirus

El intendente de venado, Leonel Chiarella, adelantó que parte de lo recaudado por la multa se invertirá en salud y más precisamente a incorporar insumos para contener la pandemia del nuevo coronavirus. “Dispuse que ese dinero que ingresará al Municipio sea destinado a la compra de mil tests para poder detectar covid-19 y para reforzar el sistema de salud de nuestra ciudad”, señaló el jefe comunal.

El Concejo Municipal se puso en sintonía con el Ejecutivo, y el mismo miércoles aprobó una comunicación impulsada por el bloque del Partido Justicialista en la que pide que una parte de lo que ingrese a las arcas locales por la multa se destine precisamente a la compra de los reactivos. Fue producto de un acuerdo previo entre los dos Poderes venadenses.

El intendente Chiarella agradeció a los trabajadores municipales que ratificaron la irregularidad sanitaria en La Anónima porque “trabajan en los controles para poder ordenar la ciudad”.

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Tras la clausura del local venadense, la cadena de supermercados difundió un comunicado dirigido a “los vecinos y autoridades de Venado Tuerto”. En el texto, la firma admite “las graves irregularidades constatadas”, pide disculpas y descarga culpas en el “accionar negligente de algunos empleados”. No obstante, asume allí “toda la responsabilidad”.

El comunicado agrega que la empresa está “llevando a cabo una investigación interna, a partir de la cual se tomarán las medidas disciplinarias que correspondan”.

 

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