David Ferrara
Difícilmente Candela Foresto encuentre un año parecido en su vida deportiva. Tuvo experiencias en competencias del exterior, pasó al equipo más importante de la Liga Nacional Femenina y se dio el gusto de vestir la camiseta de la selección argentina. Al regreso de Colombia con la medalla de bronce en el bolso y el corazón, ya encaró la etapa clave de la Liga con Berazategui (69 a 60 ante Quimsa con 5 puntos y 6 asistencias de la rosarina) y como al 2021 le quedan algunos días, por ahí se queda con otro festejo. Pero tiempo al tiempo, es momento de hablar de Argentina y los Panamericanos Junior de Colombia.
“Fue una experiencia tremenda, pude disfrutar todo lo que se vive en este tipo de competencias desde adentro, en lo deportivo con las diferentes disciplinas, deportistas y el comité olímpico, pero también con todo lo que rodea al evento. Estoy muy feliz”, explica Candela.
Parece casete, porque lo repite mucho, pero no lo es. Foresto vive este momento a pleno: “Representar a Argentina siempre me da alegría y orgullo, no sé si teníamos la meta de ganar una medalla sí o sí, quizás pasaba por ganar experiencia y disfrutar el torneo. Pero después de ganarle a Brasil es como que dijimos ‘estamos para ganar algo’ y aunque en las semifinales no se nos dio, nunca dejamos de soñar. Esa fue la clave, nunca bajamos los brazos y nos merecíamos llevarnos una medalla”.
“Estoy muy feliz en lo personal y por ganar el bronce porque aunque suene loco es algo que siempre soñé pero que no me lo esperaba. Volver a ponerme la camiseta de Argentina y en esta rama del básquet. Pero ahora cambiar el chip, meterme en los playoffs de la Liga con Berazategui para intentar cerrar el año de la mejor manera”, dijo, y lo cambió minutos después para ganarle a Quimsa y mantener el sueño de la Liga.
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