Al cabo de tres allanamientos encabezados este viernes por el Departamento Antisecuestros de la Policía Federal quedaron detenidos dos hombres implicados con el secuestro extorsivo de un joven de 27 años, hijo de un conocido empresario de la ciudad de Gálvez, cometido el pasado 14 de abril en esa localidad distante 112 kilómetros de Rosario.
Los procedimientos fueron solicitados por el fiscal federal 1 de Santa Fe, Gustavo Onel, y ordenados por el juez federal Reinaldo Rodríguez. Dos de ellos se realizaron en domicilios galvenses de Presidente Perón y España, frente a la municipalidad, y de Leandro Alem al 400. El tercero fue en Boulogne Sur Mer al 200, de San Lorenzo.
Los detenidos fueron identificados como F.Q. y M.Q., dos hermanos de 35 y 36 años, quienes quedaron a disposición del fiscal Onel junto a sus teléfonos celulares y el Ford Focus incautado. La audiencia indagatoria de los sospechosos estaba prevista para este mismo viernes por la tarde.
Durante los allanamientos quedó secuestrado un automóvil Ford Focus gris que se presume fue utilizado por los secuestradores para levantar a la víctima, identificada como Nicolás M. El secuestro fue en la esquina de Maipú y Corrientes de Gálvez, en los primeros minutos del viernes 14 de abril.
El muchacho, de acuerdo a la investigación, fue trasladado hasta una casa de ubicación no precisada, pero que se estima puede estar en el trayecto que va de San Lorenzo hasta Andino. Allí, Nicolás M. permaneció privado de su libertad. Luego, en principio tras el fallido intento de cobrar un millonario rescate, los secuestradores lo liberaron en San Lorenzo tras unas 12 horas de cautiverio.
Antes, habían realizado llamados desde el teléfono de la víctima a su madre para exigirle 200 mil dólares para liberar al joven. Sus familiares hicieron la denuncia en la comisaría 2ª de Gálvez y tomó intervención la Policía Federal más el fiscal federal, quien viajó hasta la localidad del departamento San Jerónimo para la investigación.
Tras el asesoramiento detectives del Departamento Antisecuestros zona Norte de la Policía Federal, «la familia cerró la negociación en varios millones de pesos menos –algunas versiones indicaron que pactaron 5 millones– a la pretensión inicial, apoyándose los secuestradores en la preocupación de sus padres del riesgo de muerte que su hijo corría. Es así que los citaron a una estación de servicios, ubicada en la Autopista Rosario-Santa Fe, para concretar el pago de rescate, lugar donde concurrieron con el acompañamiento reservado del fiscal y del personal de la Policía Federal», describieron este viernes los voceros de la fuerza. Luego se conoció que el joven raptado presenta una enfermedad crónica por la que necesita suministrarse insulina, lo que hizo más desesperante la situación.
Las horas transcurriendo y al llegar al mediodía, los padres de la víctima recibieron el llamado donde los captores informaron que habían decidido liberar al cautivo, en la localidad de San Lorenzo, abandonado a la vera de la ruta 11 –zona rural de Aldao–, siendo hallado por un transeúnte, que circulaba en su automóvil, sin efectuarse pago alguno por su liberación», continuaron las fuentes oficiales.
Además, el comunicado oficial remarcó que «se comprobó, que la víctima no había ingerido alimentos, ni bebido líquidos durante más de 12 horas, es decir, todo lo que duro su pesadilla, por lo que tuvo que ser atendido por un médico para recomponerse, quizás, ese entre otros fue el motivo urgente de su liberación».
En la investigación intervino la Policía Federal, y para los allanamientos se contó con la colaboración de las Fuerzas de Operaciones Especiales Geof y unidades de contención y apoyo de la Agencia Regional Federal Litoral de la Federal.