El Ciudadano
Le dicen Leo Loco, tiene 23 años y los investigadores lo apuntan como un hombre de confianza de la banda de Los Funes, el clan con sede de operaciones en zona sur que fue desbaratado en forma parcial en 2017, pero que aún sigue animando la crónica policial. Leo Loco es Lionel Marcelo V., el joven que, junto a Alan Funes, posó para una foto y un video que trascendieron las fronteras nacionales: ambos con chaleco antibalas y con una ametralladora fueron la banda sonora para los festejos de Año Nuevo.
Leo Loco fue detenido dos veces en Chacabuco al 4100 a comienzos de 2018, por portación ilegal de arma de fuego. Estuvo un año con prisión preventiva. Este lunes volvió a ser detenido, otra vez en el mismo lugar de Tablada y otra vez armado, según fuentes judiciales y policiales,
Por eso, este miércoles fue imputado por portación ilegítima de arma de fuego agravada, encubrimiento en concurso real y en calidad de autor. Quedó preso otra vez por el plazo de ley, es decir dos años, periodo en el cual la defensa puede solicitar nuevas audiencias públicas para pedir la libertad o la prisión domiciliaria. En ese lapso también la Fiscalía puede solicitar una audiencia preliminar y así llevar el hecho a un juicio oral y público, o eventualmente presentar un procedimiento abreviado, indicaron desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Manejes en el pasillo
Leo Loco fue detenido por tercera vez este lunes. Hacía un mes y medio que le habían otorgado la liberad, el 20 de febrero.
A las 20, vecinos alertaron sobre jóvenes armados en Chacabuco y Garibaldi. El personal de Comando Radioeléctrico respondió el alerta y ni bien los sospechosos divisaron el patrullero se escabulleron pero fueron detenidos en el interior del pasillo de Chacabuco 4148.
Allí a Leo Loco la Policía le secuestró un arma calibre 9 milímetros que fue sometida a peritajes para corroborar vinculaciones con hechos de abuso de armas que sacudieron Tablada en los últimos días, como lo fue el ataque a tiros que sufrió el viernes pasado el frente del Centro Cultural Alas para Crecer, de Medici al 4600. Y otra balacera que no fue informada oficialmente en Esmeralda y Garibaldi donde vive el yerno de una veterana transera, quien “hace poco empezó a vender, lo que le trajo problemas con gavillas de la zona”, según un testimonio barrial.
Sobre su relación con estas intimidaciones, desde Fiscalía dijeron: “Se Investiga algunas líneas, que por ahora están en reserva”.
La secuencia de la detención de Leo Loco descrita por voceros policiales fue casi un calco de lo ocurrido a comienzos de 2018 cuando fue capturado dos veces en el mismo pasillo, en un lapso de cinco días: el 2 y el 7 de enero. La primera vez con una pistola Beretta 765, dos chalecos antibalas de origen asiático y una máscara.
Según la denuncia al 911 del 2 de enero pasado, junto con un compinche Leo Loco estaba amedrentando a los vecinos y cuando vieron a la Policía intentaron huir sin éxito por el pasillo. Esa vez fue liberado por no contar con antecedentes. Pero el 7, cinco días después, policías que iban en un móvil del Comando escucharon tiros en la misma zona de Tablada. Divisaron a un pibe que corría en la oscuridad, al que alcanzaron en Chacabuco al 4100. Esta vez a Leo Loco le secuestraron una pistola 9 milímetros con numeración alterada, munición de punta de teflón en recámara, un cargador con 10 balas y dos vainas servidas. También 131 envoltorios de marihuana prensada y 71 dosis de cocaína. La segunda caída de Leo Loco fue motivo de cortocircuitos entre el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, y la Justicia provincial.
De Itatí a Tablada y a los diarios
En 2018 y sin proponérselo, Leo Loco llegó hasta la prensa internacional. Una foto en la que él aparece ilustró una serie de notas sobre el recrudecimiento en los enfrentamientos entre los clanes de los Funes y los Caminos, bandos enfrentados con base en la zona sur. Claro que el foco no estaba puesto en él. A su lado, estaba Alan Funes portando una metra y una pistola. La postal, tomada supuestamente durante las celebraciones de Año Nuevo, acompañaba el ya célebre video donde se ve a Alan disparando una ráfaga al aire, grabación por la cual pidieron su captura.
Alan fue detenido a fines de enero junto a su pareja Jorgelina “Chipi” Selerpe en el Fonavi de Callao y Presidente Quintana. Los imputaron como integrantes de una asociación ilícita encargada de diversos delitos y por un homicidio. Justamente, en un departamento que es el domicilio legal de Leo Loco, reveló un alto investigador consultado para esta nota.
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