Al gobernador Antonio Bonfatti no le gustó que el ministro de Defensa de la Nación, Agustín Rossi, diferenciara su gestión de la de su antecesor Hermes Binner en materia de combate al narcotráfico. Rossi había dicho que el narcotráfico en la provincia “comenzó a incubarse en la gestión de Hermes Binner” y destacó que “en los últimos meses se ve una acción mucho más contundente” por parte del Ejecutivo. Bonfatti le respondió: “Me duele que quieran sacar tajada política”.
El mandatario santafesino cuestionó –sin nombrarlo– al ex jefe de la bancada de diputados nacionales del Frente para la Victoria por “partidizar” el atentado que sufrió el viernes en su domicilio. Y propuso un acuerdo político para enfrentar al delito organizado: “La señal es encontrarnos, no partidizar este tema (la violencia vinculada al narcotráfico) que viene desde hace muchísimos años”.
En diálogo con Radio Dos, Bonfatti lamentó que Rossi haya utilizado el atentado del viernes “para sacar tajada política”. Y agregó: “Estamos ante un enemigo que tiene poder, por lo que coordinar esfuerzos entre los distintos niveles del Estado y hacer inteligencia común no es un capricho. Quienes atentaron sabían a quién apuntaban: a la institución, no a la persona, sino a todos los santafesinos”.
Con custodia permanente a raíz del ataque del último viernes –cuando cuatro desconocidos desde dos motos dispararon 14 balazos contra su casa de barrio Alberdi–, el gobernador retomó ayer sus actividades en la capital provincial. “Con custodia es fácil tomar decisiones; yo siempre pretendí ser un ciudadano más, igual que todos mis vecinos”, sostuvo.
“No existen antecedentes de esto en el país, no sólo en la provincia. Pero si pretendían amedrentarme, equivocaron el camino”, concluyó Bonfatti.
Binner, con tapones de punta
El ex gobernador y actual candidato a diputado nacional por el Frente Progresista, Hermes Binner, fue menos diplomático que Bonfatti. “El ministro de Defensa (Rossi) no puede decir lo que dice porque absolutamente desconoce (el tema) o tiene mala fe”.
“Esta es una clara maniobra para politizar una situación que es preocupante”, dijo el líder socialista, quien recordó que en su paso por el Ejecutivo provincial se ocupó del tema seguridad tratando de revertir cuestiones que, según dijo, no habían funcionado en los “24 años de gobierno del color político del ministro”.
Binner se lamentó porque “los violentos ganaron la partida” y pidió a los funcionarios nacionales “ser serios” en este tema. “Hoy no lo son; hay que tener un mapa del delito del país reuniendo a todas las fuerzas nacionales”, reclamó.
Además, el ex mandatario reiteró la necesidad de una “urgente intervención” del Estado nacional para “prevenir el narcotráfico” en la provincia y consideró que es el Estado “el que tiene que actuar en mayor medida”, a la vez que volvió a quejarse de que “todos los gendarmes hayan sido sacados de la provincia para cubrir espacios en el Gran Buenos Aires”.
El Chivo reiteró hipótesis
Desde Córdoba, Rossi reiteró ayer la hipótesis que vincula el ataque a un “accionar más decidido” del gobierno provincial contra el narcotráfico. “Es un atentado que, sin ninguna duda, merece el repudio de todos y que se inscribe en una muestra más de la gravedad que se vive en Rosario y en Santa Fe”, declaró el funcionario nacional.
Pese a las quejas del socialismo, el ministro de Defensa resaltó el trabajo de “cooperación” entre el ámbito nacional y provincial, a través de las jurisdicciones judiciales, de las fuerzas de seguridad y de los ministerios en lo que hace a la lucha contra el narcotráfico.
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