El gobernador Antonio Bonfatti recibió hoy a autoridades, cuerpo técnico y plantel del club Atlético Rosario Central, a quienes felicitó por haber logrado el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino.
“Convocamos a dirigentes y directivos porque entendíamos que era necesario hacerles un reconocimiento de parte del gobierno de la provincia, por lo que significa el fútbol en la sociedad, por el ascenso a primera, y la muestra de sacrificio que han demostrado”, dijo Bonfatti a los periodistas.
Durante la reunión, el mandatario invitó a los directivos de Central a trabajar en conjunto para “que el clásico con Newells sea una fiesta”, y a “usar al fútbol como un espacio de pacificación”.
“Todos queremos la convivencia, los entrenadores, jugadores, si nosotros damos ese mensaje, y no permitimos que los violentos entren a los estadios, la ciudad puede ser una gran fiesta”, dijo Bonfatti.
En otro orden de cosas, el gobernador anotició a los visitantes, que el Estado santafesino trabaja en la divulgación del deporte, y contó que hoy fueron presentadas las Olimpiadas Santafesinas, que reunirán a miles de jóvenes de todo el territorio (ver aparte).
Del encuentro, realizado en el despacho del mandatario provincial en la sede de Gobierno en la ciudad de Rosario, participaron, entre otros, los ministros de Economía, Ángel Sciara, y de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis; el presidente del club, Norberto Speciale; el director técnico del plantel, Miguel Ángel Russo; y el capitán del equipo, Paulo Ferrari; entre otros.
A su turno, Speciale agradeció la recepción, y coincidió con el gobernador en la necesidad de “armar una agenda con los temas que nos preocupan, entre ellos pacificar el fútbol”.
Durante el encuentro, el Bonfatti obsequió a Speciale una estatuilla que consiste en una réplica de la fachada de la Casa de Gobierno de Santa Fe, para colocar “en las vitrinas del club”, dijo el mandatario.