Política

Represión en Congreso

Bonadío ordenó allanar la casa de dos detenidos

La abogada de la Asociación Profesionales en Lucha Claudia Ferrero, que patrocina a dos de los 45 detenidos, aseguró que “la versión de los hechos de lo sucedido ha sido manipulado por personal policial”.


El juez Claudio Bonadío ordenó allanamientos en las casas de dos de los detenidos tras la represión de Gendarmería el jueves pasado frente al Congreso de la Nación cuando iba a tratarse el proyecto de ley de Reforma Previsional impulsada por el oficialismo. Aún son 20 personas las que continúan apresadas.

Así lo informó el Foro Contra la Violencia Institucional, que indicó que los allanamientos se realizaron en las viviendas de los apresados, entre ellos una docente que fue detenida cuando reclamaba la liberación de un detenido en los incidentes del jueves en la puerta de la comisaría cuarta de la Policía de la Ciudad.

Repudio de los sectores de Derechos Humanos

La ONG aseguró que “es evidente el accionar persecutorio coordinado entre el Poder Ejecutivo Nacional a cargo de las fuerzas de seguridad federales y el Juez Federal Claudio Bonadío, que no sólo buscan justificar la represión ilegal sino coartar los más elementales derechos a la libertad, la integridad física y la movilización y manifestación popular contra políticas públicas de ajuste económico y recorte de derechos”.

Poco después, se conoció que Bonadio ordenó la liberación de la docente.

La abogada de la Asociación Profesionales en Lucha (Apel) Claudia Ferrero, que patrocina a dos de los 45 detenidos, aseguró que “la versión de los hechos de lo sucedido ha sido manipulado por personal policial” y denunció que las fuerzas de seguridad “salieron de cacería”.

“Una bibliotecaria fue detenida en la madrugada de los hechos cuando estaba haciendo un aguante a detenidos en la Comisaría 4”, precisó la letrada.

En declaraciones a la prensa en la puerta de los Tribunales de Comodoro Py, en donde los detenidos iban a ser interrogados por el juez federal, Ferrero indicó que la mujer, que integra el gremio Ademys, “fue brutalmente reducida por un personal masculino de la Policía de la Ciudad, lo cual es totalmente ilegal”.

“La calificación penal de todos, incluso de los liberados, es atentado y resistencia a la autoridad e intimidación pública. La Policía salió de cacería en las motos cuando la gente se estaba desmovilizando”, acusó la abogada y se quejó de que “la versión de los hechos de lo sucedido ha sido manipulado por personal policial” para justificar las detenciones.

Gendarmes golpearon y detuvieron a una mujer que no estaba en la marcha