“Debe ser gente que esté imbuida de lo que está haciendo. De lo contrario, después de cuatro años volvemos a primer grado en este proceso de cambio que llevamos adelante”. Así se expresó Hermes Binner ayer cuando los periodistas salieron a tacklearlo antes de que entrara a la reunión con la Corte Suprema de la provincia, después de las inesperadas declaraciones del jueves, donde, sonrisa y silencio mediante, había posicionado al ministro de Gobierno Antonio Bonfatti como el candidato a sucederlo en el gobierno de la provincia.
El gobernador resolvió insistir ayer con los argumentos que lo llevaron a elegir a su ministro de Gobierno y Reforma del Estado como el candidato que mejor representa la continuidad de las políticas que se iniciaron en 2007, entrándole de lleno a las aspiraciones del senador Rubén Giustiniani y del intendente Miguel Lifschitz, hasta ahora casi mudos espectadores de los dichos de Binner. Ambos están a la espera de que se cumplan los plazos que el partido tenía fijados para elegir el candidato, aunque nada felices de llevar el cartel de alumnos que “vuelven a primer grado” después de algo más de dos años de gestión socialista en la provincia.
Siguiendo la misma línea argumentativa de Binner, aunque resaltando la potestad del partido de elegir a su candidato, el propio Bonfatti dijo ayer: “Somos doce los ministros; de cualquier manera somos todos parte de un proyecto colectivo que comenzó ya hace mucho tiempo, todos con voluntad de seguir trabajando para consolidar un proyecto que necesita tiempo”.
“Deduzco que el gobernador pretende que siga un proyecto para que en otro período se terminen de materializar cuestiones importantes para la provincia”, indicó Bonfatti, para luego agregar: “Si estoy en entre las preferencias del gobernador lo tomo, pero después lo evaluaremos”, en referencia a la discusión interna que se avecina dentro del partido, donde todos coinciden en que se resolverá por consenso, sin necesidad de internas. “En el socialismo logramos acuerdos, no va a haber internas”, resumió Bonfatti ante la consulta.
Cuando se le volvió a preguntar por las razones que llevaron a Binner a elegirlo, Bonfatti dijo: “El gobernador se refería a la importancia de una continuación de un proyecto político”, para luego agregar que “hay necesidad de consolidar este modelo y proyecto de cambio. Me gustaría ser parte de este proyecto”.
Todas las declaraciones de ayer giraron en torno al diferencial que supone para Bonfatti conocer el día a día de la gestión. “No pasa por mi interés personal sino por asumir una responsabilidad y quien lo haga tenga la oportunidad de hacerlo y que conozca los proyectos”, agregó.