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Capitán Bermúdez

Bianca tramita cambio de identidad para no llevar más el apellido de su padre abusador

La joven abusada durante 13 años por su padre biológico presentó papeles para modificar la partida de nacimiento. Y ya firmó la documentación con el apellido Emile, de su mamá Lorena. Ya tenía tomada la decisión desde que a Pochón lo condenaron en abril a 20 años de cárcel.


Bianca ya no tendrá que llevar más el apellido de su padre abusador. Ya no será más Pochón y se identificará con el apellido Emile, de su mamá Lorena. La joven de Capitán Bermúdez ya tenía tomada la decisión de cambiar su identidad desde que en abril pasado condenaron a su padre biológico a dos décadas de cárcel por haberla abusado sexualmente durante 13 años hasta dejarla embarazada.

Este martes Bianca pasó por Tribunales de San Lorenzo y se reunió con la abogada que lleva adelante la tramitación. “Tuve que ir a firmar un papel que se manda al Registro Civil, donde se pide que modifiquen mi partida de nacimiento. Y una vez modificada la partida ya podemos hacer el nuevo DNI. ¡Así que hoy fue mi primera firma como Bianca Emile!”, expresó emocionada.

“Estoy super feliz. Ya hacía varios meses que estaba esperando el llamado de ayer, la verdad que no tengo quejas. Sé que todo lo legal tarda, lleva su tiempo, y sumados los nervios y la ansiedad que tenía, fue como si todo hubiese tardado 10 veces más”, manifestó la joven bermudense.

El pasado 13 de abril, Enrique Ricardo Juan Pochón fue condenado a 20 años de cárcel. El fiscal Juan Ledesma lo acusó de haber abusado sexualmente de su hija Bianca durante 13 años, en la casa que la familia compartía en calle Chubut al 0, de Capitán Bermúdez.

Cuando Bianca tenía 21 años, después de innumerable cantidad de abusos, sometimiento, amenazas y manipulaciones, la joven de Capitán Bermúdez se animó a contar el infierno que vivía desde los 8 años. Su padre Enrique la había obligado a mentir en relación al embarazo: la víctima le dijo a la madre que la criatura que esperaba era fruto de una relación con un compañero de la facultad que “se había borrado”.

Pero a Pochón se le cayó la careta cuando Bianca se quebró ante su madre sobre la verdad del embarazo. Lorena, la sostén económica de la familia que pasaba muchas horas trabajando y fuera de casa, decidió acompañar a su hija durante todo el doloroso proceso policial y judicial.

Madre e hija fortalecieron el vínculo desde entonces. A partir del dolor y de la lucha. Y Bianca ya puede firmar con orgullo y felicidad con el apellido materno Emile.

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