En medio de la pandemia de coronavirus, los clientes de Bauen Pilay siguen reclamando el cobro de cuotas abusivas. Denuncian que desde noviembre de 2019 pagan un monto “provisorio” que, según les adelantan en la factura, será ajustado a futuro con la última actualización del índice de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC).
Para los compradores de proyectos inmobiliarios, la medición es “confusa”. Aseguran que no figura en el contrato que firmaron y temen que extiendan la cantidad de cuotas totales para cancelarlo. Como si fuera poco, el contexto de aislamiento complica la economía de cada familia en una situación de emergencia sanitaria y social. Y a la vez les impide salir a la calle en protesta, como hicieron en diciembre pasado frente a la sede de la empresa en Rosario y tenían previsto repetir el próximo lunes 30 antes de que se decretara la cuarentena.
Desesperados: este mes la cuota posesión de un Bauen Pilay llegó a los $43 mil
“Siguen intimando en cuarentena”
En la actualidad Roxana (quien prefiere que no se publique su nombre y apellido) vive con su pareja en un departamento Bauen de un dormitorio que pagó durante 6 años y al que se mudó en 2011. Como la experiencia había sido buena, y luego de tener una hija, con su pareja decidieron invertir en otra propiedad, esta vez de dos habitaciones. Pagaron más de la mitad del plan, de las 240 cuotas totales, cuando descubrieron que en la factura había interés que se sumaba a los aumentos abusivos que los clientes vienen denunciando desde hace tres años.
“El importe no llega a cancelar la totalidad de la cuota. Nos dicen que es para disminuir el impacto pero eso no está en el contrato. No sabemos si nos van a extender la cantidad de cuotas y nadie de la empresa nos sabe informar. La gente ya no puede pagar”, dijo una clienta y mencionó que para una cuota posesión, es decir, quienes licitaron y ya viven en el inmueble, el valor mensual es de más de 35 mil pesos.
“Con el parate económico que hay por la cuarentena ellos siguen intimando a pagar en término. Ni siquiera sabemos qué estamos pagando”, agregó.
Los clientes denunciaron que ni siquiera las empleadas de la empresa supieron explicarles cómo estaba calculado el aumento. “Hicimos la cuenta y notamos que el porcentaje de incremento en la boleta era mayor al anunciado por la empresa en un comunicado que enviaron. Cuando llamamos por teléfono nos pidieron que vayamos a la oficina. Allí nos atendieron cuatro personas distintas y ninguna nos supo explicar el cálculo”, señalaron.
Sin contemplación
En el complejo escenario económico que atraviesa el país y el mundo a raíz del aislamiento por la pandemia, llegar a fin de mes se hace cuesta arriba para muchas familias. En ese contexto, pagar una cuota que en muchos casos representa un sueldo hace más difícil la situación.
Este martes, el presidente Alberto Fernández anunció una serie de medidas para favorecer a los sectores más golpeados, entre ellos a quienes alquilan o tomaron créditos hipotecarios. Pero para los clientes de Bauen estos anuncios no representaron ningún alivio. El contrato los ubica como parte de una transacción de compra venta por lo que no son ni inquilinos ni hipotecarios. Ante la desesperación, buscan visibilizar la situación y piden ayuda del Estado.
Aumentos
En Rosario hay cerca de 14.000 clientes suscriptos a planes de construcción de vivienda a 20 años. Las cuotas de un departamento de dos dormitorios superan los 40 mil pesos para quienes viven en ellos. Y unos 15 mil es el valor de la cuota espera.
Según los datos proporcionados por el presidente de la firma, Vigo Leguizamón, en marzo de 2015 la cuota de espera de un plan costaba 2.140 pesos.
En el mismo mes de 2017, los clientes pagaron 4.812 pesos, lo que implicó un aumento de 124 por ciento. Si se aplican los indicadores publicados mensualmente de la CAC el aumento debió haber sido del 71,2 por ciento. Esto es un 53 por ciento menos de lo que la firma exigió como pago para seguir el camino hacia la casa propia, dijeron los denunciantes.
En el caso de la cuota posesión los aumentos fueron los mismos, aunque sobre sumas mayores. En marzo de 2015 la cuota de las personas que ya habitan departamentos ascendía a 6.286 pesos. Dos años más tarde el recibo a cancelar fue por 14.133 pesos. Otra vez, el aumento acumulado fue de 124 por ciento y el desfasaje fue de un 53 por ciento más que el 71,2 sugerido por la CAC.
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