Un hombre de 37 años fue asesinado ayer por la mañana en una pelea entre vecinos de dos barrios de la zona sur. De acuerdo con voceros al caso, eran un par de grupos que venían de un boliche, donde habían tenido un cruce. Ya en la calle, la cosa se puso más difícil y, entre un mar de piedras que llovían, dos personas empuñaron armas de fuego y dispararon en varias ocasiones. Algunos de esos plomos impactaron en la víctima, quien murió en el acto, mientras que dos de sus acompañantes recibieron tiros en las piernas.
Hasta anoche no había detenidos por el hecho, pero en la pelea hubo testigos que aseguraron a los pesquisas que pueden reconocer a los agresores.
Según vecinos del barrio Las Delicias, las peleas entre los muchachos de la zona con un grupo del barrio 17 de Agosto son moneda corriente. Siempre hay piñas, pedradas y corridas. “Los quilombos grosos se arman cuando están todos de caravana, ahí se pudre”, explicó a El Ciudadano un comerciante de la zona.
De acuerdo con voceros del caso, la pelea arrancó en la madrugada de ayer en Gema, un boliche ubicado en bulevar Oroño y Uriburu. El local estaba repleto, porque tocaba Sergio Torres y los Dueños del Swing, una de las bandas más convocantes de la cumbia santafesina. Allí se agarraron Diego Fernando Burgueño, de 37 años, y sus amigos, con un grupo de pibes del 17 de Agosto. En medio del baile empezaron los empujones, que rápidamente derivaron en piñas. El personal de seguridad intervino y, siguiendo el protocolo estipulado para este tipo de casos, separaron a las dos facciones: los de Las Delicias quedaron dentro del boliche y sus contrincantes fueron expulsados. La idea era que no se cruzaran.
Pero un rato después de la pelea dentro de Gema, cinco muchachos de Las Delicias salieron del boliche y fueron en busca de sus contrincantes, que eran, al menos, siete.
De acuerdo con fuentes de la investigación, más o menos las 6, los dos grupos volvieron a verse las caras.
El nuevo choque fue en Sancho Panza al 2000, entre Moreno y Balcarce (al 5200). Gritos de por medio, los bandos empezaron a tirarse piedras, que fueron regando toda la calle.
Pero, según testigos, los pibes de Las Delicias no contaban con la misma fuerza para la pelea. “Siempre se agarraban, pero los del 17 de Agosto son mucho más pesados y andaban enfierrados”, explicó un vecino.
En medio de la pelea, empezaron a escucharse las explosiones. Tres plomos impactaron en la espalda de Diego Burgueño y le salieron por el pecho. La víctima cayó tendida en la vereda, a mitad de cuadra. Murió en el acto. Otros dos muchachos de Las Delicias, Santiago M., de 19 años, y un pibe de 15, recibieron disparos en las piernas que no pusieron en riesgo sus vidas.
En la escena del crimen, empleados policiales recogieron siete vainas calibre 9 milímetros. Según los peritajes realizados sobre la evidencia, fueron detonadas con dos armas.
Voceros de la pesquisa señalaron que en la balacera de Las Delicias hubo varios testigos, quienes podrían identificar a los tiradores que, según una versión, se trasladaban en moto.
El caso es investigado por la Fiscalía de Homicidios Dolosos en turno, con la colaboración del personal de la comisaría 21ª de barrio Las Delicias.
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