Edición Impresa

Barone, un delfín en el mar

El panelista del programa “6,7,8” estuvo en Rosario y habló de diferentes temas. La ley de Medios, el rol del trabajador de prensa en la actualidad, la militancia política entremezclada con el oficio, entre otros.

Por: Guillermo Griecco

El periodista Orlando Barone, con amplia trayectoria en diferentes medios de comunicación nacionales, estuvo el último viernes en Rosario para hablar sobre la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, del trabajador de prensa en el marco del Día del Periodista que se celebra mañana, del fenómeno televisivo “6,7,8” que se emite por canal 7, donde él es panelista, y también de la militancia entremezclada con el oficio. La charla de Barone, convocada bajo la consigna “Pensar el rol de los medios como constructores de ciudadanía”, se desarrolló en la sede del Sindicato de Trabajadores Municipales y fue organizada por el instituto de periodismo Iset 18. El encuentro a sala llena congregó a personas de distintas edades pero sobre todo jóvenes, y también tuvo como propósito recordar el bicentenario del periodismo político a partir de la aparición de la Gazeta de Buenos Aires, fundada por Mariano Moreno el 7 de junio de 1810.

  Barone, siempre provocador y corrosivo, sostuvo sin ánimo de generalizar que el periodismo de hoy es de derecha. “El periodismo y los periodistas son de derecha. Los medios donde trabajamos son de derecha y los empresarios que nos pagan los sueldos son de derecha. Salvo que uno trabaje en un blog o en una publicación más pequeña”, sostuvo Barone, de 72 años, nacido en el barrio porteño de La Boca, hijo de padres peronistas sindicalizados. “Sin embargo yo no salí peronista, pero tampoco antiperonista”, contó como apostilla.  

  “Los periodistas son como delfines entrenados para chapotear en un acuario. El adiestrador les da en la boca su comidita, su premio y el público, es decir oyentes o lectores, aplaude. El delfín está feliz, hace lo que quiere y cree que está en el mar. Pero parte de un error, porque no hace lo que quiere, ya que fue adiestrado para hacer lo que hace. Además, no está en el mar sino que es un acuario que simula el mar y le pagan por eso que hace”, metaforizó el periodista y escritor.

  Y continuó: “Entonces viene la ley de Medios, y esta ley es la que abre las puertas al mar, pero el delfín, como ya les pasó a varios delfines según estudios del ecosistema, cuando lo sueltan al mar se caga todo y el pelotudo se vuelve al acuario como un cachorrito. La mayoría de los periodistas quieren quedarse en el mar, pero no lo confiesan. Yo quiero estar en el mar”.

  “El periodista no puede ser rico y famoso, o ganar cifras millonarias y vivir en un palacio. A los panelistas de «6,7,8» nos dicen que el Estado nos paga no sé cuanto de sueldo. Y a Nelson Castro, ¿quién le paga el sueldo, el Ángel de la Guarda? Tampoco hay necesidad de que el periodista viva en una tapera, tiene que estar en el medio, mezclarse con la sociedad”, opinó.    

  Barone dijo que no era un militante, pero que le daba cierta nostalgia y se arrepentía de no haberse involucrado en política en sus años mozos. “No soy Rodolfo Walsh que se jugó la vida por una idea, o Paco Urondo o Haroldo Conti, por mencionar algunos intelectuales asesinados por la dictadura. Pero siento que con el tiempo me volví progresista y no conservador, como le pasa a mucha gente de mi edad”.  

  En otro tramo de la charla, Barone habló del programa “6,7,8”. “Hoy los actores sociales están poniendo sobre mí una responsabilidad que yo no quería tener. Yo no soy yo, soy yo y ustedes, y eso nos pasa a todos los que estamos en el panel de «6,7,8». Ese programa fue posible porque antes el telón lo corrió la sociedad”, indicó.

  “El conflicto de los negocios rurales produjo en la sociedad, contra la intención que buscaba derechizarla e instalar la idea de la decepción, un antídoto contra el interés intencionado de ese negocio. Hoy siento que los actores sociales se recuperaron y que se sacaron de encima ese pájaro (los medios) que picotea la cabeza para machacar con ese discurso de derecha”, cerró Barone.

Comentarios