El Hincha

Ciclismo de descenso

Bariloche tuvo a los mejores

Se disputó en el sur del país la primera fecha del espectacular Open Shimano.


Hace diez años los mejores ciclistas de descenso de Latinoamérica reclamaban, en silencio, una carrera así. “¿Cómo puede ser que no tengamos una competencia importante con los corredores que hay y el crecimiento que ha tenido la disciplina?”, se preguntaban ante la falta de respuestas de las federaciones y las empresas. Hasta que dejaron de hacerlo y pusieron manos a la obra. Y así fue que al compromiso de los bikers (por eso hoy su lema es “de corredores para corredores”) y a los distribuidores del negocio se sumó Shimano, la empresa japonesa número uno del deporte para ser el sponsor principal y cargarse al hombro este circuito latino que en este 2018 está cumpliendo diez años. Ya pasaron más de 4.000 corredores, 20 medallistas panamericanos, 14 países fueron representados y se disputaron 38 carreras en 17 circuitos distintos. Así fue que el Open pasó de ser un campeonato nacional a convertirse en el más trascendente de la región y en esta edición, para festejar este aniversario, se busca un salto de calidad que ya empezó a verse en la primera fecha disputada en el Cerro Catedral de Bariloche.

Fueron 170 los corredores que se encontraron en la ladera sur del Catedral para este Downhill Sudamericano, cuyo nuevo circuito fue catalogado por los ciclistas como “el mejor de la historia”, por lo desafiante y exigente gracias a los nuevos peraltes, curvas pronunciadas y espectaculares saltos. Hubo al menos diez competidores de primer nivel que llegaron desde distintos países de Sudamérica y Europa. En la categoría top, Elite Pro, el ganador fue el chileno Mauricio “Taka” Acuña (con 4m19s43), quien sorprendió al ganarle al prestigioso colombiano Marcelo Gutiérrez (top 10 mundial y mayor ganador de la historia de la competencia), que terminó casi dos segundos después. Mario Jarrin, de Ecuador, completó el podio. El mejor argentino resultó Jerónimo Báez, quien había ganado en 2017.

En la categoría Enduro se impuso el italiano Dennis Tondin, en Damas se coronó Valentina Benavides y en Menores (hasta 14 años) festejó Cristóbal Beltrán. Otros ganadores fueron Santiago García (Cadetes), Gonzalo Gajdosech (Juveniles), Nicolás Angulo (Amateur), Diego Cancino (Master A1), Ezequiel Faccio (Master A2), Matías Kennedy (Master B) y Marcos Mallmann (Master Pro).

Esta es una competencia en la que los competidores descienden por un circuito marcado, repleto de dificultades naturales y artificiales, como pueden ser árboles, sus raíces, piedras, rocas, barro o polvo. La velocidad de bajada es importante, a veces se llegan a los 70 km/h aunque a veces es más peligroso hacerlo a 30 km/h en el barro mientras esquivas árboles, raíces y rocas. Los recorridos van de 2m30 a 5m, con desniveles promedios de 350/400 metros, aunque el de Bariloche es aún más exigente, con 2.400 metros de extensión y un declive de 600 metros.

“En Europa y Estados Unidos esta es una modalidad muy arraigada. Se realiza en las mismas montañas donde están los centros de nieve, aunque en verano. El descenso, además, es mucho más que una competencia. En la industria de la bici es como si fuera la Fórmula 1 porque las empresas es donde testean sus componentes, desde frenos hasta suspensiones pasando por los cuadros. Para nosotros haber llegado a los diez años es muy emocionante, porque lo hicimos a pulmón”, explica Martín Cepi Raffo, quien es corredor (fue segundo en Master Pro) además de ser uno de los organizadores del Open Shimano.

Acuña, el ganador, sorprendió con su triunfo y se mostró muy contento con su actuación.

“Venía con poca expectativa porque el nivel de corredores era muy alto, pero llegué muy bien entrenado y pude administrar mi físico. Realmente estoy muy feliz, por la victoria en uno de los mejores circuitos de Sudamérica y porque ya son diez años corriendo en el evento”, destacó.

Gutiérrez, en tanto, rescató la exigencia del trazado. “Es una pista que cuesta demasiado y por eso vine, por la dificultad que me causa. Hay que saber qué esperar, cómo enfrentarla y cuándo arriesgar”, analizó el consagrado colombiano.

El Taka considera que el Open Shimano puede ir por más como evento. “Acá hace falta una Copa del Mundo para que los sudamericanos podemos demostrarle al mundo de lo que somos capaces”, se animó el chileno.

Por lo pronto, el circuito seguirá en julio con la segunda fecha en Ecuador y cerrará en diciembre en Chile.  Un torneo que explotó y hoy es el descenso más importante de Latinoamérica.