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Nuevo Código Penal

Balance positivo de la reforma

El fiscal general Julio De Olazábal brindó su primer informe anual ante la Legislatura. Lanzó advertencias a la Policía y elogios a la clase política por cambiar el sistema judicial. Desde el 10 de febrero detalló que se iniciaron 47.326 legajos.


Con advertencias a la Policía (“deberán investigar bajo la dirección de los fiscales”) y elogios a “la clase política santafesina por la valentía para cambiar el sistema judicial”, el fiscal general de la provincia Julio De Olazábal dio su primer informe ante la Legislatura: 47.326 legajos iniciados en 126 días corridos desde la aplicación del nuevo sistema penal –que empezó a regir el 10 de febrero–, lo que implica 376 legajos por día en todo el territorio provincial.

Ayer por la mañana, el fiscal general dio su primer informe anual ante las cámaras en el recinto del Senado. El vicegobernador Jorge Henn presidió la audiencia y el titular del Ministerio Público de la Acusación estuvo acompañado por el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto.

De Olazábal hizo hincapié en el cambio de paradigma que significó el nuevo Código Procesal Penal reformado en 2007: “La nueva Fiscalía no quiere reproducir errores del pasado. Una de las prácticas que se debe desterrar es dar por esclarecido el hecho por el solo anuncio de la detección de un sospechoso, abandonando la investigación”.

El fiscal general destacó “la valentía” de todos los sectores políticos de la provincia por la reforma –sancionada por unanimidad– y dijo que “ya se están viendo los frutos” de su aplicación. No obstante, reclamó a la Legislatura y al Poder Ejecutivo los acuerdos necesarios para que se designe más personal para el Ministerio Público, ya que funciona con la mitad de los fiscales que debiera tener.

“Las expectativas despertadas a consecuencia de la eficaz actuación de fiscales en muchos casos en que les fue posible intervenir tempranamente, no pudieron ser satisfechas en otros, pero ello no fue fruto de la desidia sino de distintas circunstancias, entre las cuales parece oportuno señalar dos: la cruda realidad y el imperio de la ley”.

“La simple relación –continuó De Olazábal– entre el número de hechos delictivos que ocurren y el de fiscales existentes, hasta ahora sólo 50 por ciento de los concebidos por ley, evidencia la imposibilidad material de los fiscales para atender personalmente todos los casos y hacerse siempre presentes en el lugar de los hechos”.

Ahora el desafío central, según el fiscal, es la creación de un Organismo de Investigaciones especializado que funcione en la órbita del Ministerio Público. Es un tema que ha generado varios contrapuntos entre la Legislatura y el Ejecutivo, que De Olazábal atribuyó a “desinteligencias que impidieron que se plasmara el texto aprobado, pero ya existen nuevos proyectos que necesariamente deben prosperar”.

Por último, el fiscal le envió un mensaje a las fuerzas de seguridad: “No es cierto que el nuevo Código o la nueva Fiscalía hayan atado las manos de la Policía, sino que ella deberá investigar bajo la dirección de los fiscales”.

Henn: “Se dio un paso importante”

El vicegobernador Jorge Henn destacó el acto institucional realizado ayer en el Senado, en el cual el fiscal general Julio De Olazábal dio su informe anual ante las cámaras.

“Este acto, para nuestro sistema democrático, está estrechamente vinculado con el carácter abierto y público del nuevo sistema (penal), en donde los hechos son puestos para el conocimiento de todos los ciudadanos”, remarcó Henn.

“Santa Fe ha dado un paso más que importante al reformar su sistema penal y ya estamos viendo sus primeros frutos. La agilidad que tanto se le reclamaba a la Justicia hoy es algo concreto. Los tiempos de los procesos se han acelerado: por ejemplo en el término de 72 horas ya se puede dictar una prisión preventiva, en tanto que antes se requerían aproximadamente 20 días”, agregó el vicegobernador.

Por último, Henn afirmó que “el nuevo Código Procesal tiene consecuencias directas en la vida cotidiana de la gente, da mayor participación y protección, pero por sobre todas las cosas una visión integral de la justicia que pone el foco en todos los estamentos sociales, realizando acciones que corrijan el funcionamiento desigual y persecutorio penal”.

Y continuó: “Podemos decir que Santa Fe hoy camina firmemente hacia una justicia penal verdaderamente democrática y eficaz”.

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