Espectáculos

Adelanto estreno

“Azul el mar”, la opera prima de Sabrina Moreno, una mirada retrospectiva de los vínculos familiares

La película, un drama que transcurre en los años 90 e indaga en los recuerdos de la propia infancia y familia de la directora, se podrá ver este jueves a las 20 en Cine.ar TV y seguirá disponible en Cine.ar Play durante una semana en forma gratuita


Azul el mar, la ópera prima de Sabrina Moreno que indaga en los recuerdos de su propia infancia y familia, que hoy, tras dos décadas, se transforman en una relectura de la sociedad, se podrá ver gratis este jueves, desde las 20, en Cine.ar TV, al tiempo que el film quedará disponible en Cine.ar Play durante una semana.

“La idea surgió como una urgencia por retratar recuerdos que sentí que intentaban decirme algo. Estaba soñando con el mar y con las imágenes que me quedaban de los veraneos en la costa con mi familia, y todo eso era tan potente que me volcó a escribir. Comencé a preguntar a mis hermanos qué recordaban ellos, a hacerme yo misma preguntas, y a jugar con los personajes para recrear y hacer ficción de las situaciones”, explicó la cineasta a la agencia de noticias Télam.


Moreno comentó que cuando finalizó el guión, se dio cuenta de que estaba escribiendo sobre la familia que ya no era. “Todos nos habíamos hecho más grandes, y supongo que sentía que algo de eso se había perdido. Hacer la película era una manera de poder conservarlo”, expresó.

La cámara de la directora pone en primer plano a Lola, médica y madre de familia que deja de lado muchos de sus deseos personales y laborales para mantenerse en la crianza de los hijos, mientras que su marido, Beto, trabaja en obras sin tener en cuenta esa censura impuesta por su esposa.

En unas vacaciones en Mar del Plata, mientras juegan y pasean con sus hijos, Lola pone en palabras lo que sus pensamientos dicen desde hace tiempo: ya no aguanta dejar su vida interior en segundo plano.

Si bien es un tema personal e intrafamiliar, la lectura que se hace el film de los años 90 con la visión en perspectiva desde 2020 permite observar dónde estaba la Argentina entonces y dónde está hoy respecto del rol de la mujer y cómo fue variando el concepto de familia.

“Creo que estamos en un proceso de volver a evaluar todo lo que creíamos que era una verdad, todo lo que estaba delimitado como inamovible y el «porqué las cosas son así». Nos estamos dando cuenta de que no, de que las cosas tienen que ser de una manera más equitativa, que necesitamos lograr acuerdos de convivencia. Y para eso hace falta mucho espacio para dialogar, permitir que entren nuevas ideas y sanar eso que nos hace tanto mal”, dijo la directora.

Haciendo un análisis sobre la actualidad, Moreno consideró que la equiparación entre el rol del hombre y el de la mujer es una pelea que continúa. “Podríamos decir que estamos en la lucha para lograr eso”, apuntó la realizadora. “Y que hemos logrado algunos avances; pero no podría decir que estamos equiparados, aún falta muchísimo por hacer, las muertas siguen apareciendo todos los días como «encontradas» y no como «alguien que las mató». Incluso si vamos a aquellos países en donde la cultura de la mujer como objeto del hombre es tan fuerte y arraigada, pienso que nos faltan siglos… Y tampoco hay que ir tan lejos, acá mismo en nuestro país seguimos con esas estructuras arcaicas”, profundizó.

En la película, el marido, en un momento le dice que es capaz de hacer cualquier cosa con tal de verla feliz, como un intento desesperado de reconocer el “egoísmo” con el que se venía manejando. “Hay algo que se está desarmando frente a sus ojos y aunque él todavía no parece entender bien qué es ni por qué, intenta generar respuestas para ver qué es lo que debería hacer, o más bien qué es lo que se espera de él. Porque muchas veces se trata de eso: le pedimos al otro que nos diga qué es lo que tenemos que hacer, como si no fuéramos parte responsable de lo que sucede”, apuntó Moreno.

“Las relaciones se van construyendo un poco sobre la marcha al principio, pero que hay momentos definitorios para las parejas en donde los roles y las relaciones de poder y deseo se van haciendo más evidentes, entonces todo el tiempo hay que ir revisando y reajustando ese pacto”, agregó. Mientras que sobre el rol que cumplen los hijos en ese proceso, confesó: “Esa es la pregunta que yo me hacía mientras escribía el guión. Cuántas parejas se mantienen por salvar lo que han construido por sus hijos, cuánto de eso hay en cada decisión que toman. ¿Qué significa una familia? Por qué tenemos esta idea de que familia es bajo el mismo techo, dado que no siempre funciona así”.

En Azul el mar la música cumple un rol muy importante. “Fue algo intuitivo y de experimentación. La idea de la música es generar ciertas emociones y sensaciones, que en relación con las imágenes puedan construir puentes para entrar en una dimensión distinta. Me parece muy interesante trabajar de este modo, creo que la música tiene la potencia de transportarnos a diferentes situaciones y estados de ánimo de manera tan inconsciente que, de alguna forma, nos libera y nos ayuda a reconocer nuestros propios sentimientos”.

Comentarios