Policiales

Preparan la imputativa

Atrapan en el Aeropuerto de Ezeiza a sospechoso en el crimen de Marcos Guenchul

Un hombre de 32 años fue detenido cuando intentaba abordar un vuelo con destino a Beirut, Líbano. Su vehículo, un Peugeot 208 negro, fue ubicado en la escena del crimen, rastreado y finalmente secuestrado el pasado 6 de agosto


FOTO: FACEBOOK

Un sospechoso en la causa por el crimen del entrenador Marcos Guenchul, el joven asesinado de un disparo en la cabeza el pasado 23 de julio en Sucre al 1200, fue detenido en el aeropuerto de Ezeiza cuando se disponía a abordar un avión con destino a Beirut, Líbano. El arresto lo hizo la Policía de Seguridad Aeroportuaria, indicaron fuentes de la Fiscalía Regional. Caio S. tiene 32 años y la investigación lo ubica como “partícipe” del asesinato, agregaron.

La investigación que comanda el fiscal Adrián Spelta, con auxilio de la División Homicidios de Policía de Investigaciones, trabajó en las horas posteriores al crimen y ubicó el Peugeot 208 utilizado en el hecho, a través de un meticuloso seguimiento de cámaras. La evidencia obtenida derivó en dos allanamientos el pasado 6 de agosto, en una cochera de Entre Ríos al 1400 y en Laprida al 5000. En uno de ellos el vehículo –cuya chapa está a nombre del sospechoso– fue secuestrado junto a material de interés para la causa, dijeron voceros judiciales.

Para ese entonces los detectives tenían datos certeros y el señalado estaba prácticamente cercado.

Este sábado por la noche, la PSA detuvo en el aeropuerto de Ezeiza a Caio S., de 32 años, cuando se disponía a subirse a un vuelo que tenía como destino a Beirut, Líbano. Al parecer en ese país de oriente viven familiares, dijo una fuente.

“Se procederá a solicitar la extradición interprovincial para realizar la audiencia imputativa en los próximos días. Los detalles del rol asignado en la causa de homicidio se reservan para la audiencia”, confirmaron fuentes judiciales. Los móviles del asesinato aún no fueron revelados.

El crimen

Minutos antes de las 22 del martes 23 de julio, Marcos Guenchul, de 32 años, salió de trabajar en el local Progress Fitness Center, de Mendoza 4936, donde se practica entrenamiento funcional. Caminó hacia Sucre, hizo 25 metros y allí dos hombres se le pusieron por detrás y uno de los le disparó en la cabeza. Otro balazo impactó en la fachada de un edificio.

Guenchul quedó tendido en la calle y a los pocos minutos llegó personal de Comando Radioeléctrico. A las 22.15, la víctima ingresó al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) y tras varias horas de agonía le diagnosticaron muerte cerebral. Sus familiares decidieron donar sus órganos. El caso tuvo alto impacto público y allegados y amigos del entrenador organizaron marchas para pedir justicia.

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