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Ataque en Alberdi

Atentado contra Bonfatti: desfilan policías por Tribunales

La jueza Rodenas tomó declaración testimonial al ex jefe de la seccional 10ª y hará lo propio con otros tres uniformados.


La investigación judicial que lleva adelante el juzgado de Instrucción 2ª de la magistrada Alejandra Rodenas en torno del atentado que sufrió el gobernador Antonio Bonfatti en su domicilio particular, el 11 de octubre de 2013, registró novedades en las últimas horas al tomársele declaración testimonial al comisario Ronald Cuñé, por entonces jefe de la seccional 10ª, con jurisdicción en el lugar del ataque. Además, se conoció el pedido del fiscal de la causa Enrique Paz para tomarle declaración como testigo al propio gobernador, aunque se especula que recién se hará efectiva después de la feria judicial y a través de un escrito.

Fuentes judiciales indicaron que la jueza Rodenas le requirió un informe pormenorizado al entonces inspector de zona Ariel Bengochea y añadieron que se les tomará durante esta semana tres nuevas testimoniales a uniformados vinculados con la causa. Esta magistrada tomó el expediente originalmente radicado en Instrucción 5ª (hasta fin del año pasado a cargo de la controvertida jueza María Luisa Pérez Vara) luego de la entrada en vigencia del nuevo sistema penal, el 10 de febrero último. Desde allí se registró mayor actividad en el expediente con la judicialización de todas las testimoniales que se habían realizado en sede policial, describieron las mismas fuentes.

Cuñé se desempeñaba al momento del ataque como jefe de la seccional 10ª, con jurisdicción sobre la casa del gobernador. Según fuentes judiciales, el uniformado, en calidad de testigo, sólo se limitó a relatar la situación anterior al atentado en la comisaría a su cargo. El oficial hizo referencia a una serie de incendios que se habían dado en frentes de viviendas y entraderas en la zona, dijeron los voceros, quienes añadieron que el uniformado hizo mención a lo actuado en ese sentido y resaltó que todo el accionar se realizó con conocimiento de sus superiores y mostró documentación respaldatoria.

Previo al atentado, en la madrugada del 20 de julio, una bomba incendiaria impactó en el frente de una casa en Agrelo al 1500, allí también se encontró un manuscrito dirigido precisamente a Cuñé, donde se detallaban nombres, apodos y direcciones de supuestos quioscos de venta de drogas.

Citación para el gobernador

El fiscal Enrique Paz realizó un pedido de declaración testimonial para Antonio Bonfatti. A partir de allí, el gobernador está facultado para elegir entre ir a declarar personalmente o remitirle a través de su abogado (el ex ministro de Justicia Héctor Superti, querellante en la causa) un pliego de preguntas para que sean contestadas por escrito. Esta última opción es la que se presume va a elegir el gobernador, aunque se realizará después de la feria judicial. Además, Superti también ofreció la declaración testimonial de la esposa del mandatario santafesino.

En un hecho que no tiene antecedentes en la vida democrática del país, el 11 de octubre pasado el frente del domicilio del gobernador Bonfatti recibió 14 impactos de bala. Por esta causa están detenidos el policía que revistaba en la comisaría 10ª Pablo Espíndola, a quien se le secuestró una pistola que fue utilizada en el atentado, y Emanuel “Pimpi” Sandoval, sospechado de haber perpetrado el ataque. Lucas Sandoval, hermano de Pimpi, había sido detenido por un arma que finalmente se determinó que no fue utilizada en la balacera, aunque continúa detenido en un expediente separado por portación ilegal de arma de fuego. En tanto Saúl Sánchez y Germán Ramírez siguen vinculados a la causa aunque gozan de libertad restringida.

Escuchas

También desde el fuero provincial se reiteraron una serie de oficios vinculados con las escuchas que están en poder de la Justicia federal sobre el diálogo de dos internos que supuestamente planeaban un atentado contra el juez Juan Carlos Vienna, el fiscal Guillermo Camporini y el subcomisario Luis Quebertoque, de la descabezada División Judiciales. Desde la Justicia santafesina quieren corroborar si en esas escuchas realizadas en el expediente Reina Quevedo, entre los detenidos Germán Almirón (también ex integrante de Judiciales) y César Treves (procesado por homicidio y considerado testigo clave en la megacausa Monos) se registra algún dato de utilidad para esta investigación.

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