La casa de Nora está ubicada al lado de un lavadero, frente a una pollería, a pocos metros de la plaza de O’Higgins y a tres cuadras de la seccional 11ª. Ayer, a las cuatro de la tarde, dos motociclistas golpearon a su puerta y apenas asomó la nariz la acribillaron. El cuerpo de la mujer de 58 años quedó tendido en el pasillo de ingreso a su domicilio que compartía con su marido y varios hijos. Allí, la Policía incautó media docena de vainas calibre 9 milímetros en medio de un ambiente tenso que se propagó hasta la soleada esquina de zona sur. Ningún vecino o curioso se animaba a acercarse al lugar, donde se hizo presente el fiscal de Homicidios Pablo Pinto.
El crimen ocurrió en Regimiento 11 87 bis, en una casa de pasillo. Los plomos fueron dirigidos contra Nora Graciela Oroño, quien al menos recibió cinco impactos, uno de ellos en la cabeza. Según una fuente del caso, dos muchachos que circulaban en moto golpearon a la puerta y cuando la mujer atendió, la ejecutaron.
“A eso de las tres de la tarde se juntaron un montón de motos en la puerta. Hay un lavadero al lado del pasillo de Norita. Todo el tiempo entraban y salían motos.”, dijo un vecino que aceptó hablar alejado del lugar.
“Escuché unos cinco tiros y corridas, dicen que persiguieron a dos pibes que andaban en moto. Pero no podemos ni acercarnos porque el ambiente está áspero”, dijo un joven mientras que otro, ante la cuadra desolada de vecinos dijo que la familia de la mujer acribillada no permitió que nadie se acerque. “Me gritaron «doña, vaya a lavar la ropa» y me metí adentro”, contó una señora.
El fiscal de Homicidios Pablo Pinto se presentó en el lugar y aguardó la llegada de la mortera. Confirmó que en la escena se incautaron seis vainas servidas, en principio compatibles con calibre 9 milímetros y dijo que espera los resultados de la autopsia. En relación al móvil del crimen, que tiene tintes de ajuste de cuentas, no adelantó ninguna hipótesis. Sin embargo, la relación marital de dos de los hijos de Nora (de apellido Yosti) con hermanas del Cuatrerito, asesinado a principios de este mes, no pueden descartarse como hipótesis.
Matías Franchetti, segunda línea de la barra rojinegra fue emboscado y asesinado el pasado 7 de junio frente a la puerta 6 del Estadio de Newell´s Olds Boys. Una de sus hermanas es la pareja de Gerardo Yosti, hijo de Nora, detenido hace dos años en un allanamiento en el que la Policía buscaba a un sindicado miembro de la banda de Los Monos, Juan Domingo Ramírez, en Uruguay al 3900. No lo encontraron pero sí 16 kilos de cocaína en el fondo de su casa, además de dos armas de fuego, tres litros de acetona y un precursor químico. Tres personas quedaron detenidas en lo que se consideró un depósito, entre ellas una de las hermanas del Cuatrerito y su pareja Gerardo. En 2012, el Cuatrerito había sido detenido en Portugal acusado de traficar más de una tonelada de cocaína escondida en carbón. El otro arrestado fue Miguel Moreno, también en pareja con una hermana del Cuatrerito.
Otro de los hijos de Nora es Eduardo Yosti que fue asesinado de tres balazos por la espalda hace tres años cuando tenía 27. También estaba en pareja con una de las hermanas Franchetti, según explicaron los vecinos.
Otras dos hermanas del Cuatrero, que los vecinos describieron como “muy bellas”, están en pareja con Milton César, un joven cuya familia fue asesinada y en una las sangrientas vengazas que siguieron al crimen del Claudio Pájaro Cantero, jefe de Los Monos.
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