El Ciudadano
En pelea. La Asociación de Trabajadores del Estado cumplió una jornada de paro este jueves en el hospital Anselmo Gamen de Villa Gobernador Gálvez y en todas sus áreas de desentendencia en reclamo del pase a planta “de todo el personal precarizado” del efector, el fin de la “persecución” a trabajadores y trabajadoras por actividades sindicales y por la renuncia del director del efector, Marcelo Minicucci.
A la medida de fuerza, que se hizo en conjunto con el gremio de profesionales de la salud (Siprus) y dejó con guardias mínimas la atención en la ciudad, se le sumará este viernes un capítulo nacional: para las 9.30 está convocada una asamblea de delegadas y delegados en ATE Rosario en áreas municipales, provinciales y nacionales para discutir la modalidad local y regional del paro general del gremio en todo el país para el próximo martes 10.
“Fue un paro importante porque no sólo paró el hospital sino también los cinco centros de salud”, destacó uno de los delegados de ATE en el Gamen, Daniel Albachiaro. “Otro hecho muy importante es que paró Siprus, los dos gremios manifestaron juntos y eso le da mucha fuerza al reclamo”, agregó el dirigente gremial.
Albachiaro remarcó que la medida cumplida este jueves se sintió con fuerza en todos los sectores del efector de salud, “pero se garantizó la atención por guardia”.
Con la contundencia de la medida de fuerza, los delegados mantendrán este viernes una reunión con la ministra de Salud, Andrea Uboldi, a quien expondrán la situación en el efector: en particular denunciarán los “aprietes” que padece el personal por parte de la dirección, que incluyeron, según graficó el delegado, las amenazas de barrabravas en una etapa anterior del conflicto.
Para visibilizar la situación resultó clave que la medida de fuerza también fuera decidida por Siprus. “Nos reunimos en la puerta del hospital y reafirmamos lo que veníamos reclamando. La unidad con Siprus es un punto de partida para actuar juntos en defensa de los derechos de los compañeros”, relató Albachiaro.
Además de la jornada de pelea sectorial, en la que también se reclamó el pago de salarios adeudados a una afiliada –monotributista a la que le hicieron descuentos–, ATE va por un reclamo en la misma sintonía, pero amplificado a lo nacional. Con los reclamos de reapertura de paritarias, reincorporación de trabajadores despedidos, emergencia alimentaria y salario superior a la canasta básica, el gremio estatal irá al paro con movilizaciones en todo el país, como continuidad de su plan de lucha.
“La medida está enmarcada en la exigencia de reincorporación de todas y todos los trabajadores despedidos, reapertura salarial, restablecimientos de todos los programas que fueron dados de baja, el rechazo al acuerdo entre el gobierno y UPCN para la estabilidad y aumento desmedido de los cargos jerárquicos en la alta dirección pública, y rechazar el escaso aumento resuelto por el gobierno en la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil realizada el pasado viernes. Y, en el marco de la jornada del pasado 28 de agosto, ATE continúa movilizado en la lucha para enfrentar el hambre”, informó la comisión directiva nacional del sindicato.
La jornada se cumplirá en Rosario con movilización, cuyos detalles se confirmarán hoy tras el plenario en la sede de San Lorenzo al 1800.
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