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Atalaya y Caova ganaron en la primera fecha del cuadrangular final

El Azul derrotó 62 a 52 a Echesortu y arrancó de la mejor manera el cuadrangular final de la A1 rosarina. Mientras que el Funebrero venció 96 a 78 a Sportsmen.


Arrancó el cuadrangular final de la división A1 del básquet rosarino y tanto Atalaya como Caova dieron un primer paso positivo. La acción continuará este miércoles en Sportivo América con Caova vs. Echesortu y Sportsmen vs. Atalaya. Pero vale la pena repasar lo que ocurrió el lunes.

PLAN Y EJECUCIÓN PARA EL TRIUNFO DE ATALAYA

Lucía atractivo el cuadrangular final de la A1 porque más allá de que nuevamente falló la Rosarina en la difusión (no hubo tiempo ni para una presentación del certamen) y aglomeró muchos partidos definitorios, llegaron a esta etapa cuatro equipos con variantes en sus planteles, con entrenadores afianzados en su profesión y con presente y pasado inmediato más que interesante para el básquet de la ciudad. Cualquiera le podía ganar a cualquiera, dependía de las formas, del despliegue táctico y de la noche de los intérpretes.

Atendiendo a ese concepto, fue Atalaya el equipo que mejor preparó el juego inaugural de la noche en un Amílcar Tamburri desbordante de color (sobre todo por parte de la hinchada del Azul). El equipo de Mariano Junco tuvo toda una gama de defensas para oponer a su adversario, pero el precepto era frenar el accionar cerca del aro y negar gol cómodo a Boselli por lo que siempre hubo atención y solidaridad, más allá del sistema que se estuviera utilizando. Así, el Azul obligó a que la bola pase mucho por la mano de Esquivel y poco por la de Bísaro, y a Echesortu le costó generar cada vez que Sbarra se desprendía de la pelota.

Muchas pérdidas, acciones individuales carentes de sentido, y jugadores que cuando tenían espacios no resolvían. En el básquet actual de cualquier división, que te floten en la marca se castiga con lanzamiento o directamente se le da al rival un argumento de lo más poderoso.

El juego era trabado y de bajo goleo, pero el trámite favoreció al Azul, que fue inteligente para mover la pelota y aunque muy pocas veces pudo correr, siempre supo encontrar a un hombre grande de frente al aro para lanzar de tres. Una y otra vez tanto Pérez como Yanson castigaron la falta de lectura de Echesortu y abrieron la brecha que Sbarra no pudo cerrar a pesar de que sacó la cara por el equipo. Después, el reloj hizo lo suyo y el Azul sumó sus primeros porotos. Ahora viene Sportsmen, justo Sportsmen.

SÍNTESIS

ECHESORTU (52): Franco Sbarra 23, Martín Bísaro 9, Dante Esquivel 8, Lucas Boselli 5, Sebastián Sánchez 1 (fi), Marcos L’Abbate 3, Nahuel Colaneri 3, Pedro Bravo, Dalmiro Dos Santos, Lucas Drab. DT: Claudio González.

ATALAYA (62): Lautaro Suárez 4, Mauro Moreno 4, Santiago Orellano 8, Federico Pérez 24, Maximiliano Yanson 18 (fi), Leandro Pugnali, Facundo Maruelli, Brandon Gargicevich 4. DT: Mariano Junco.

ESTADIO: Amílcar Tamburri

ÁRBITROS: Rubén Abelardo y Francisco Iocco

PARCIALES: 9/15, 24/31, 37/43.

CAOVA, EN MODO CAMPEÓN

Caova ama este tipo de partidos definitorios. Mientras para algunos equipos la presión que genera disputarlos se convierte en un limitador de aptitudes, para el Funebrero se transforma en el fuego interior que lo moviliza y le permite dar lo mejor de sí. Ello quedó demostrado ante Sportsmen por la primera fecha del cuadrangular final, en donde dio una clase de personalidad para vulnerarlo en todas las facetas de juego y vencerlo con autoridad por 96 a 78.

En ese contexto, en cuanto se acomodó al partido, rápidamente encontró la fórmula del éxito y limitó a la mínima expresión a su rival. Así fue como luego de que el Verde se ponga 12 a 6 en el marcador, apareció el sello de Caova con la intensidad defensiva marcando el ritmo, neutralizando los embates de Sportsmen y abriendo el camino para que Gabriel Domínguez se convierta en el amo y señor del encuentro.

Sí, con la excelsa conducción del base (hizo todo a la perfección), los dirigidos por Néstor Gnass fueron una verdadera aplanadora, imponiendo su jerarquía en todo los sectores. De esa manera, hubo momentos para que Maggi y Muñoz ganen en la pintura, otros para que Gastón Rojas demuestre su determinación hacia el canasto y los restantes para que los ingresos de Correa y Molina desde la banca le dieran dividendos concretos.

Esos diez minutos perfectos, en donde estableció un parcial de 22 a 0, fueron determinantes para que Caova se asegure psicológicamente la victoria con mucha anticipación. Es que tiene jugadores formados a la perfección para este tipo de encuentros, y por consiguiente, cada vez que el Verde intentó inquietar durante el complemento con Mateini como abanderado, aparecieron Maggi, Muñoz, Rojas y Domínguez para frenarle el ritmo y permitirle a Caova tomar una ventaja en el tanteador que terminó siendo de 18 puntos y adquiere un rol vital de cara a la definición de este cuadrangular.

SÍNTESIS

SPORTSMEN (78): Juan Cravero 0, Facundo Dayer 3, Gonzalo Caviasso 13, Mauricio Tzoiriff 11, Ignacio Tripelli 7, Mateo Pastorino 8, Julián Mateini 12, Erick Topino 21. DT: Gonzalo Pastorino

CAOVA (96): Gastón Rojas 26, David Gavio 2, Gabriel Domínguez 23, Sebastián Chianea 2, Pablo Maggi 14, Franco Correa 6, Bautista Gentile 4, Germán Muñoz 16, Adrián Molina 2. DT: Néstor Gnass

ESTADIO: Amilcar Tamburri – Sportivo América

ÁRBITROS: Cristian Alfaro – Federico Boelaert

PARCIALES: 12/19, 23/40, 52/66

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