El seleccionado argentino de handball masculino perdió ante Brasil por 26-23 (14-9 parcial) y terminó subcampeón del torneo internacional Cuatro Naciones que se llevó a cabo en el Polideportivo de Sao Bernardo do Campo, en Sao Caetano do Sul, y dejó una imagen satisfactoria en la primera competencia oficial del ciclo comandado por el entrenador español Manolo Cadenas.
Los Gladiadores, que venían de vencer a Chile (29-24) y Uruguay (35-18), tuvieron un partido de menor a mayor ante los brasileños, ante quienes ya habían caído por 21-18 en un amistoso previo, y tuvieron que conformarse con el subcampeonato.
Más allá de la derrota ante el clásico rival, el balance final del cuerpo técnico nacional tiene saldo más que satisfactorio, ya que con un equipo formado con mayoría de jugadores del ámbito local, más algunos de España y Brasil, consiguió dos victorias y le plantó batalla al actual campeón panamericano, que dispuso de sus máximas figuras para este certamen.
Cadenas no pudo disponer de los jugadores argentinos que se encuentran jugando la Champions League con sus respectivos equipos, Montpellier francés y Ademar León español, y otros jugadores que militan en el Viejo Continente y son una fija para la siguiente convocatoria para el torneo Memorial Domingo Barcénas a realizarse en enero de 2018 en Vigo y Pontevedra.
En esta oportunidad no fueron parte del plantel la gran figura criolla, Diego Simonet (Montpellier), su hermano Sebastián, el capitán Gonzalo Carou y Federico Vieyra, todos del Ademar.
Tampoco fueron convocados Pablo Simonet (Benidorm español), Pablo Vainstein (Ciudad Encantada de España) y el arquero Matías Schulz (Pfadi Winterthur suizo).
Durante la jornada, en un estadio colmado de hinchas locales, Argentina cometió una gran cantidad de errores en el manejo de la pelota y se fue al descanso perdiendo por cinco goles. Para el segundo tiempo, Cadenas ajustó algunos detalles y el rendimiento colectivo mejoró.
Luego de correr de atrás durante todo el partido, los argentinos estuvieron a tiro del empate a falta de ocho minutos y se pusieron uno abajo (22-23), pero una serie de malas decisiones y la efectividad local le bajaron la persiana al partido.
