A partir de julio próximo la Argentina comenzará a exportar a Brasil langostinos, cítricos y medicamentos, al tiempo que ambos gobiernos acordaron ayer analizar la concreción de un aumento (que lleve la alícuota al 35 por ciento) en el arancel externo común que rige para importaciones industriales provenientes de países extra Mercorsur, con el objetivo de proteger a los mercados locales.
Dentro de las negociaciones establecidas, al margen de las barreras mutuas que se aplican al intercambio comercial, en los próximos quince días una delegación argentina viajará a Brasil para terminar de pulir cuestiones técnicas que permitirán incrementar las exportaciones de los productos mencionados.
En la reunión, celebrada en la sede de la Secretaría de Comercio Exterior, participaron la ministra de Industria, Débora Giorgi; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler; y Beatriz Paglieri, la anfitriona. Por el lado brasileño estuvieron el secretario Ejecutivo del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio de Brasil, Alessandro Teixeira; la secretaria de Comercio Exterior, Tatiana Prazeres; y el embajador de Brasil en Argentina, Enio Cordeiro, entre otros.
En una conferencia luego del encuentro, los funcionarios argentinos señalaron que se lograron “acuerdos sustanciales” sobre una gran cantidad de bienes y servicios con Brasil, y que avanzaron en establecer un incremento en el arancel externo común que hoy rige para las importaciones extra Mercosur. “Con Brasil, el principal socio comercial de la Argentina, hemos alcanzado acuerdos sustanciales en una gran cantidad de bienes y servicios”, dijo Kreckler.
Paglieri, en tanto, destacó: “Los representantes de Brasil fueron a la reunión con respuestas sobre dos temas en los que tradicionalmente hemos tenido problemas: cítricos y langostinos”, y a partir de este diálogo “hay un compromiso para que ya puedan ingresar esa mercadería a Brasil a partir del 1º de julio”.
Por su parte, Giorgi calificó al encuentro como “muy positivo, ya que “se llegó a mecanismos de soluciones que faciliten el crecimiento del comercio bilateral, las inversiones, y dinamizar una mayor producción productiva”. La funcionaria destacó: “Hoy las condiciones de acceso a la Argentina de los medicamentos brasileños son fluidas, y queremos que ocurra lo mismo para los medicamentos argentinos, para que accedan al mercado brasileño”.
En la reunión, los funcionarios de ambos países también coincidieron en la necesidad de incrementar la prevención ante los posibles coletazos de la crisis externa. “Existe preocupación compartida por la crisis mundial que vemos agudizarse en los próximos meses. Vemos la necesidad de adoptar políticas proactivas”, dijo al respecto Kreckler.
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