Alvaro Arellano
Con eje en obra pública, seguridad y la polarización con el kirchnerismo, Juntos por el Cambio despliega su campaña en el territorio santafesino. En diálogo con El Ciudadano, el precandidato a diputado nacional Federico Angelini consideró apropiado separar las elecciones provinciales de las nacionales, ya que para las Paso presidenciales confían en captar a votantes que en junio se inclinaron por Omar Perotti y Antonio Bonfatti.
El titular del PRO en Santa Fe se refirió también a la interna entre precandidatos a diputados de Juntos Por el Cambio. Explicó que hubo un acuerdo a nivel nacional para que la lista de legisladores que vaya pegada a la fórmula presidencial, sea “la de mayor consenso”. En ese sentido consideró que mientras su boleta “tiene una representación territorial muy importante”, la de Martín Rosúa representa a “un sector minoritario” del radicalismo.
En referencia a la economía provincial, Angelini reivindicó la quita del fondo sojero, al entender que hay que “bajar las cargas tributarias, no aumentarlas”. A su vez cuestionó las denuncias del gobierno provincial por discriminación en la asignación de recursos coparticipables, y aseguró que con Macri “Santa Fe recuperó un 15% de la coparticipación”.
Por otra parte, sostuvo que el problema de la provincia hoy no pasa por los fondos que dependen de Nación, sino con empezar a “reducir costos políticos”. En el marco del acuerdo con la Unión Europea, se refirió a “seguir abriendo mercados” y “bajar la carga tributaria”.
—¿Puede haber un correlato entre la merma de votos que sufrieron como fuerza en las elecciones a gobernador con estas próximas Paso?
—Esta es otra elección, nacionalizar las elecciones provinciales es un error. Hay muchos votos de Omar Perotti y Antonio Bonfatti que van a ir a Mauricio Macri. Esos electores no quieren volver atrás, porque saben el daño que le hizo el kirchnerismo a Santa Fe.
—¿La campaña apunta a reforzar a Juntos Por el Cambio en determinados puntos del territorio santafesino que estén más allá de Rosario y la capital provincial?
—Nosotros tenemos un único proyecto, que es que Macri y (Miguel Ángel) Pichetto sean electos en octubre. Nosotros no nos focalizamos en un diputado más o un diputado menos. El proyecto más importante es el de la fórmula presidencial. En agosto se empieza a definir el modelo de país que le queremos dejar a nuestros hijos. No estamos discutiendo un diputado más o menos.
—¿Por qué se dio ese pedido ante la Cámara Nacional Electoral para que sean ustedes la única lista que vaya pegada a la del presidente Macri y no pueda hacer lo propio la que encabeza Martín Rosúa?
—Ese sector del radicalismo ya sabía desde el primer día que no había ningún tipo de voluntad por parte de la fórmula presidencial de que vayan pegados (a la boleta de Macri). Hubo un acuerdo político entre los distintos partidos que integran la coalición a nivel nacional, y se decidió que solamente la lista de mayor consenso iba a ir pegada a la de la fórmula presidencial. La lista de mayor consenso es la nuestra, la de ellos corresponde a un sector minoritario del radicalismo, son todos del MAR (Movimiento de Acción Radical), y la nuestra tiene una representación territorial muy importante.
—¿Cómo repercute esta interna a tan pocos días de la elección?
—Todo esto que está haciendo Rosúa, lo único que hace es conspirar contra el proyecto de reelección del presidente Macri y, además, él fue candidato en el 2017 por afuera de Cambiemos y perdió. Él fue candidato en el 2019 y perdió, también es tiempo de dejarle lugar a otros.
—¿El hecho de que esa boleta no vaya adherida a la de Macri–Pichetto, puede quitarle caudal de votos al interbloque en la provincia?
—No, es un sector minoritario del radicalismo. Nadie le dijo a Rosúa que no se presente, más allá del show mediático que él hace, sabía desde el primer minuto que había un acuerdo para presentar la lista de mayor consenso.
—¿Qué cuestiones rescatan de la actual administración nacional en relación a la provincia para convencer a los vecinos a la hora de recorrer el territorio?
—Lo que tenemos que puntualizar es cuánto sufrió Santa Fe con los doce años de kirchnerismo, y en estos tres años y medio cuán bien le fue a la provincia en términos de recepción de recursos por parte del Estado nacional y eso se traduce en obras y mejoramiento de calidad de vida. Esas obras, en tres años y medio fueron mucho más que las que se hicieron en doce. También hay que hablar de cuánto se reforzó el tema de la seguridad, debido a que antes del 2015 se cobraban las fuerzas federales por parte del Estado nacional y a partir de 2015 no se cobraron más. Hay más efectivos federales y se está haciendo un trabajo en serio de investigación e inteligencia.
—Hay una constante denuncia de discriminación en la asignación de recursos por parte del ministro de Economía santafesino, Gonzalo Saglione, ¿hay que revisar el tema coparticipación?
—El ministro Saglione sabe que miente, ese gráfico que él muestra sobre los fondos que se enviaron a las provincias en 2018, omite decir que la provincia de Santa Fe cobra toda la coparticipación desde el 1° de enero de 2016. Ese gráfico muestra que las provincias están recibiendo proporcionalmente más dinero que Santa Fe, pero es porque se les empezó a devolver la coparticipación de forma gradual que el kirchnerismo le había quitado. Santa Fe la cobra desde 2016, por eso no tiene un aumento de la coparticipación.
—¿Cómo evalúan la evolución de la asignación de recursos desde Nación a la provincia durante la gestión Cambiemos?
—Gracias al presidente Macri, Santa Fe recuperó el 15% de coparticipación, y no es solamente por el fallo de la Corte, porque todas las provincias lo recuperaron. Esos son más recursos que van a más obra pública. Cuando recorro la provincia, pregunto a todos qué obra recuerdan del kirchnerismo en Santa Fe, y ninguno me puede nombrar una obra emblemática. Nosotros en Rafaela te podemos nombrar el caso de Vila Cululú, en el departamento Belgrano, en Iriondo, en (el canal) arroyo Las Tortugas, obras por más de 800 millones de pesos. A mí no me lo pueden contar a eso porque estuve en las inauguraciones, son innumerables obras que con el kirchnerismo no existieron.
—¿Existe la posibilidad de plantear la restitución del Fondo sojero para devolverle un ingreso importante a las arcas de la provincia?
—Nosotros lo que necesitamos hacer es bajar las cargas tributarias, no aumentarlas. Las arcas de la provincia, gracias a los fondos que envía Nación están en equilibrio fiscal. El problema que tiene Santa Fe es que tiene que empezar a reducir sus costos políticos. En Santa Fe, cuando asumió el socialismo, había alrededor de 350 cargos políticos, hoy hay más de mil. Lo que tiene que hacer Santa Fe es administrar mejor la provincia. Eso es más plata para el Estado y menos plata para los sectores productivos o para obra pública.
—¿Qué política debe ser prioritaria en caso de una eventual reelección por parte de Mauricio Macri?
—Lo más importante tiene que ser la reducción de la carga impositiva, y más frente a la posibilidad de seguir abriendo mercados. Tenemos que seguir abriendo mercados y eso lleva como correlato bajar esa carga tributaria que se hace gracias al equilibrio fiscal que estamos logrando este año. Necesitamos bajar los impuestos para que la economía pueda producir y expandirse más.
—¿Hay propuestas a corto plazo para reducir los índices de pobreza y desempleo?
—Lo que mencioné antes se traduce en inversión, en exportaciones y en la manera más genuina de crecer económicamente. Ese crecimiento económico va a dar más trabajo y más reducción de la pobreza.
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