El candidato presidencial de Unión para el Desarrollo Social (UDESO), Ricardo Alfonsín, reconoció la “existencia de inconvenientes” en la alianza gobernante que integran radicales y el socialistas en Santa Fe y que lidera Hermes Binner, aunque pidió “no engancharse”.
“No podemos dejar de reconocer la existencia de estos inconvenientes, pero no creo que sea bueno engancharnos en esa discusión”, afirmó Alfonsín, tras considerar que es un tema que “no le interesa a la sociedad” en el marco de la campaña electoral.
De esta forma, Alfonsín buscó bajar el tono a la polémica que se generó luego de que la vicegobernadora radical Griselda Tessio, acusara al candidato presidencial del Frente Amplio Progresista de tener una “posición hegemónica” en detrimento del resto de las fuerzas de la alianza que le permitió al mandatario llegar al poder.
El aspirante presidencial aceptó en declaraciones radiales que “es interesante analizar” este tema, pero evaluó: “En el término de una campaña electoral lo que debe estar queriendo la sociedad es que le digamos cómo vamos a resolver los problemas que tienen que ver con las cuestiones que más le afligen”.
Las críticas del radicalismo a Binner en la boca de Tessio, el senador Ernesto Sanz, el candidato a diputado Federico Pezz y el presidente de la UCR bonaerense, Miguel Bazze, se produjeron luego de que el gobernador insistiera en que “el siglo XXI es del socialismo” y que “los otros son del siglo pasado”.
En respuesta, Humberto Tumini, secretario general de Libres del Sur y candidato a diputado a nacional por el FAP atribuyó las críticas radicales “al escenario que tiene al gobernador santafecino en claro crecimiento y a Ricardo en baja”.
“Una parte de la dirigencia radical no tiene mejor estrategia para ver de revertir la malaria que se les viene que cargar sobre Binner. Qué pobreza la suya. ¿Y si en lugar de eso, hacen alguna autocrítica de haber acordado lista común con Francisco de Narváez y luego, para remacharla, apoyar a Macri en la Buenos Aires?”, señaló Tumini.
El dirigente agregó en un comunicado que en las primarias “una parte nada desdeñable del elector tradicional de la UCR le puso su voto a Binner, en disconformidad con la estrategia de alianzas que materializó aquella dirigencia” y sostuvo que “la cuestión amenaza ser peor en las lecciones de octubre”.
“Hay signos de estampida de votantes de Alfonsín en dirección al FAP. Las pruebas están a la vista: los candidatos a gobernadores e intendentes de la UCR con posibilidades de ganar sus comicios quieren llevar también la boleta de Binner pegada a las suyas. La mayoría del votante radical apoyará que el 23 de octubre sea fuerte una oposición progresista al actual Gobierno, no una oposición por derecha”, cerró.
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