Son alrededor de mil los policías santafesinos en actividad bajo la lupa por haber sido denunciados de cometer delitos de distinta gravedad institucional en los últimos siete meses. Así lo confirmó ayer el titular de la Secretaría de Control de las fuerzas de seguridad provincial, Ignacio del Vecchio, luego de que trascendiera una denuncia anónima sobre una presunta banda de cinco uniformados, algunos de ellos con alto rango dentro de la fuerza, acusada de regentear quioscos de droga en la zona sur de Rosario.
“Cuando recibimos una denuncia, nosotros hacemos la investigación preliminar. Si conseguimos material probatorio de relevancia la elevamos por sumario administrativo a la División Judicial de la Unidad Regional que corresponda”, dijo Del Vecchio, quien anunció que a fines de mes se pondrá en marcha un Tribunal de Conducta Policial que estará compuesto por funcionarios de la secretaría a su cargo, además de un cuerpo de fiscales conformado por policías (tanto de alto rango como con títulos de abogados) y funcionarios políticos dependientes del Ministerio de Seguridad provincial.
Según los datos brindados por Del Vecchio, en los últimos siete meses se iniciaron alrededor de mil sumarios administrativos contra policías en actividad, y son cerca de un centenar quienes están siendo investigados por enriquecimiento ilícito.
“A partir de la denuncia se inicia una investigación preliminar y después se evalúa si tiene entidad y se traslada al fuero penal”, apuntó Del Vecchio. No obstante, no todos los uniformados que están bajo la lupa son apartados de sus funciones mientras se los investiga. De hecho, días atrás, una escandalosa denuncia contra cinco uniformados de Rosario acusados de conformar una banda narco llegó a la Secretaría de Control del Ministerio de Seguridad y sólo uno fue pasado a disponibilidad, por estar seriamente comprometido en una filmación, informó el funcionario.
Esa causa se inició el pasado 26 de enero a través de una denuncia que llegó a manos de Del Vecchio por medio de un correo electrónico, donde una persona que se identifica como mujer policía brinda detalles del supuesto accionar de una banda de uniformados de alto rango en la Unidad Regional II dedicada a la venta de droga en el sur de Rosario.
La Secretaría de Control también recibió un CD que contiene un video, aparentemente grabado con un celular, donde se ve a un suboficial con tijera en mano cortando bolsas de nylon para fraccionar cocaína. De los cinco uniformados acusados en esa denuncia, que radica en el Juzgado Federal Nº 4, a cargo de Marcelo Bailaque, sólo el que aparece en la filmación fue pasado a disponibilidad luego de que se cotejara que la captura fílmica corresponde al policía. Hasta el momento, a los cuatro restantes se los empezó a investigar por enriquecimiento ilícito, aseguró Del Vecchio.
Entre las acusaciones de la denuncia se señala que la banda de presuntos polinarcos está liderada por un alto funcionario de la fuerza, a quien se le atribuye regentear varios quioscos de droga de la zona sur, en su mayoría ubicados en jurisdicción de la seccional 11ª.
En un fragmento del mail puede leerse: “Lamentablemente la fuerza está podrida y eso los mandos inferiores lo ven. ¿Cómo hace un comisario principal con un sueldo de 15.000 pesos mensuales para conducir una Volkswagen Amarok de casi medio millón de pesos? ¿O un sargento con un sueldo de 9.000 pesos para ir a trabajar en un Chevrolet Cruze de 300.000?”.
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