Política

Pasión por Rosario

Adiós al Tigre Cavallero, el hombre que hacía política a flor de piel

Fue intendente de Rosario de 1989 a 1995, cuando impulsó pilares de gestión que llegan hasta la actualidad. Fundó su propio partido y estuvo a un paso de ser gobernador de Santa Fe. Defendió con pasión sus ideas políticas y de gestión 


El ex intendente de Rosario, Héctor Cavallero, a quien todos conocían por su apodo El Tigre, falleció este viernes, en el día de su cumpleaños número 81. Desde hacía años padecía una enfermedad que finalmente terminó con su vida. Con su estilo pasional y directo, dejó una huella en la política y especialmente en sus seis años de gestión municipal. Tras el alejamiento del socialismo, en los 90, fundó su propio partido y desde ese momento fue aliado casi permanente del peronismo. Nunca le escapó al debate y siempre generó reconocimiento de su entereza como político, entre propios y extraños.

Cavallero nació en la ciudad de Las Parejas el 2 de octubre de 1939. Allí hizo la escuela primaria en la escuela Ovidio Lagos. Los estudios secundarios los cursó en Córdoba, en el Liceo Militar General Paz. Y llegó a Rosario para estudiar en la Universidad: se recibió de bioquímico en 1965, en la facultad de Ciencias Médicas que entonces dependía de la Universidad Nacional del Litoral.

En 1983, en el retorno de la democracia tras la sangrienta dictadura cívico militar, El Tigre fue candidato a gobernador de Santa Fe. Dos años después, ocupó una banca en el Concejo Municipal de Rosario por el partido Unidad Socialista. Hasta que, en 1989, ante la renuncia del entonces intendente radical Horacio Usandizaga, se convocaron elecciones para elegir a quien finalizaría el mandato. Allí, como candidato de la Unión Socialista, fue jefe del Palacio de los Leones hasta 1991. Previamente, había ganado popularidad con las denuncias por corrupción en el llamado caso Fibraca, aunque casi no pudo hacer campaña por una enfermedad que sufrió en los meses previos a la elección. Su primera gestión tuvo que enfrentar hiperinflaciones, saqueos y deudas de todo tipo. Pese a todo, consiguió la reelección para el período 1991-1995. Sus mandatos marcaron las políticas públicas de la ciudad, en particular en el área de la salud.

Cavallero mostró desde joven su vocación política: fue delegado de cursos en su paso por la Universidad, consejero estudiantil de la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario y luego de la Universidad Nacional del Litoral. Llegó a ser presidente de la Federación Universitaria del Litoral y estuvo en la conducción de la Federación Universitaria Argentina. Desde ese lugar, participó en 1964 como delegado en el 8° Congreso de la Unión Internacional de Estudiantes, en Sofía, Bulgaria, y en el comité preparatorio del Congreso por la Paz y la Liberación Nacional de los Pueblos de Argelia.

Ya como bioquímico. en el Hospital Carrasco, fue delegado del personal entre 1966 y 1968 y secretario seccional del Sindicato de Trabajadores Municipales entre 1969 y 1971. Integró el Consejo Directivo de la CGT de los Argentinos Regional Rosario, organización desde la cual participó de las luchas por la recuperación de la democracia durante la dictadura de Juan Carlos Onganía, y antes contra el represivo plan Conintes, durante el gobierno de Arturo Frondizi.

Luego de su tarea al frente de la Intendencia de Rosario, que marcó un quiebre en la impronta política del Ejecutivo local, fue otra vez candidato a gobernador en 1995, elecciones en las que perdió por menos del 1% de los votos, frente al candidato del reutemismo, Jorge Obeid.

Previamente, ya había iniciado su alejamiento del PSP, con la fundación del Partido del Progreso Social (PPS), más afín al peronismo que en ese momento presidía Carlos Menem. A partir de 2009 integró el Frente para la Victoria.
En 1997 asumió como concejal de Rosario por el PPS. Y dos años después, como diputado nacional por la misma fuerza, hasta 2003. En 2009 retornó al Concejo Municipal, por tercera vez. En 2015 fue elegido diputado provincial hasta el 2019.

Su paso por la Intendencia

Durante su gestión como intendente se desarrollaron numerosas obras en la ciudad, como por ejemplo la extensión de red de gas a toda la ciudad y el plan integral de grandes desagües pluviales, que terminó con las inundaciones en gran parte de la ciudad. Durante su gestión, se hicieron 6.000 cuadras de pavimento, 1.400 manzanas de cloacas, veredas, complejos polideportivos. También amplió el Geriátrico Municipal y abrió 147 comedores comunitarios.

Además, durante su gestión se creó el boleto de transporte de pasajeros gratuito para los mayores de 69 años y la exención de la Tasa General de Inmuebles a jubilados de propiedad única. También se implementó el boleto a mitad de precio para los estudiantes, vigente hasta la fecha.

Cavallero logró jerarquizar la salud pública, invirtiendo la tercera parte del presupuesto municipal en esa área. También se promovieron obras como el Paseo del Siglo, la remodelación de calla Corrientes, el reciclado del bulevar Oroño, la remodelación de todos los museos municipales y otros sectores de la cultura de la ciudad.

Mediante la Ley 24.146, que lo tuvo entre sus impulsores, se recuperaron, para los municipios y comunas, cientos de hectáreas sobre la ribera del río Paraná, logrando que la ciudad recuperase el contacto con el río, y permitiendo obras viales que facilitaron el tránsito automotor.

En combinación con el gobierno nacional, peleó por la realización de la Hidrovía Paraná – Paraguay que permitió el dragado río Paraná, otorgando el acceso de buques de gran calado hasta de la zona de influencia de Rosario. También en colaboración con la provincia y la Nación se realizó la presa contenedora de agua del Arroyo Ludueña y el Conducto Aliviador II.

En 1990 fundó, junto a los Intendentes de Buenos Aires, Córdoba, Corrientes y Neuquén, la Federación Argentina de Municipios. En materia de salud pública, durante la gestión se fortaleció el sistema de Atención Primaria y la Producción Pública de Medicamentos a través del Laboratorio provincial. Durante los 4 años que duró su gestión, se inauguraron 7 nuevos centros de salud y se comenzaron a construir y a licitar hospitales de mediana y alta complejidad. Fue designado por las Naciones Unidas como Alcalde Defensor de los Niños en 1993 en México y en 1994 en Francia.

“El mejor intendente”

El diputado provincial por el Frente Social y Popular, Carlos Del Frade, publicó un homenaje a quien consideró “el mejor intendente” que tuvo Rosario y uno de los constructores de una “izquierda popular” como espacio político nacional aún en deuda. “El Tigre Cavallero soñó con una izquierda popular, nacional y cercana con el pueblo y lo logró a su manera. Fue el mejor intendente de Rosario. Hasta hace tres semanas nos llamaba para denunciar y aportar datos sobre el lavado de dinero de Vicentin y fue el primero en denunciar el narcotráfico en su amada ciudad. Me fascinaba escuchar sus historias y en los últimos años compartimos conferencias de prensa y casi todos los pedidos de informe que nunca nos contestaron. En el colmo de la coherencia se murió el mismo día en que nació. Chau Tigre querido. Te voy a extrañar mucho mucho. Gracias por los aciertos y por los errores, gracias por la tozuda convicción de no callarte nunca”, señaló Del Frade.

“Hoy con mucho dolor nos enteramos del fallecimiento del gran dirigente político, Héctor “Tigre” Cavallero. Quienes lo conocimos supimos de su fuerza, de su garra, de su compromiso con la política como medio para cambiar para bien la sociedad”, publicó el gobernador Perotti.

Por su parte, el actual intendente de Rosario, Pablo Javkin, expresó: “Viviste apasionado por hacer de esta ciudad un lugar más justo. Incansable y generoso, compartiste tu mirada y enseñaste tu visión. Hasta siempre, Tigre. Y gracias de corazón”.

Al mismo tiempo, el ex gobernador Miguel Lifschitz escribió: “Nos dejó el Tigre Héctor Cavallero. Fue un militante y un luchador toda su vida. Hace más de 30 años se convirtió en el primer intendente socialista de Rosario. Se lo recordará por su gestión en la ciudad y por su pasión por la política. Un abrazo a su familia y amigos”.

“Adiós a un compañero y amigo. Se va un militante que dedicó su vida a hacer de Rosario un mejor lugar para vivir, con todos adentro”, publicó el concejal Eduardo Toniolli. “Aprendí mucho con vos. Transformaste la ciudad en salud e infraestructura. Escucharte sobre historia política y la participación en la construcción democrática siempre, fue con saldo positivo. Elegí esta foto porque disfrutábamos mucho compartir de campaña y hablar con los vecinos y vecinas. Abrazos para la Negra, la familia y compañeros. HLVS”, escribió la concejala Norma López.

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