Uno de los integrantes de la banda acusada por el robo al Banco Municipal de Empalme Graneros, perpetrado en mayo del año pasado con un botín de 1 millón y medio de pesos, fue condenado a diez años de prisión en juicio abreviado que se firmó ayer. Se trata de Pablo Alejandro Ruiz, de 29 años, apodado Gordo, quien también aceptó haber sido parte del asalto a un exclusivo club de polo de Roldán en el que actuó con integrantes de la misma banda. A Ruiz se le decomisó un auto y varios electrodomésticos nuevos que compró con el botín robado. Había sido detenido con otros tres hombres semanas después del golpe al Municipal. El sindicado jefe del grupo, Sergio “Mono” C. y a quien le adjudican otros golpes a entidades crediticias, fue atrapado en agosto pasado, tras el robo al Banco Credicoop de Roldán.
El juicio abreviado fue homologado ayer por el juez Javier Beltramone. La fiscal Cecilia Brindisi, por el Ministerio Público de la Acusación, y el defensor de Ruiz, Marcelo Piercecchi, acordaron una pena unificada en diez años de prisión efectiva. Ruiz fue declarado reincidente por una condena previa a cuatro años y seis meses de diciembre de 2011.
El acuerdo contempló el decomiso de un Chevrolet Astra, comprado con 90 mil pesos en efectivo, y electrodomésticos nuevos: un lavarropas, un extractor, una heladera, una cocina y un termotanque, comprados con el botín del Banco Municipal.
Ruiz fue condenado por dos robos. El primero y más conocido fue el golpe al Municipal de Juan José Paso al 5700, perpetrado el 8 de mayo de 2015. Ese día un hombre se paró a modo de campana en la puerta de la oficina recaudadora 405 de la sucursal Empalme Graneros. Sus cuatro compañeros entraron con armas, entre ellas una ametralladora FMK3, le pegaron al vigilador, amenazaron al tesorero y rompieron la puerta del tesoro a mazazos. El grupo se alzó con 1.685.000 pesos y huyó en una moto y un Fiat Palio blanco.
Tras analizar las imágenes de las cámaras de seguridad y también por información de calle, la Unidad de Investigación y Juicio de la Fiscalía y la Policía de Investigaciones (PDI) identificaron a los cinco integrantes de la banda. En ese marco, el 23 del mismo mes Ruiz cayó detenido junto con Jorge Luis Z., de 28 años, Marcos C., de 24 y José Horacio F., de 29.
El otro robo por el que fue condenado Ruiz ocurrió en el club de polo La Ilusión, ubicado en Roldán, sobre la ruta 9. Fue el mediodía del 18 de marzo de 2015, cuando los dueños de la estancia se aprestaban a almorzar con sus empleados y llegó una pareja que, días antes, había consultado por clases de equitación. Cuando el dueño abrió el portón, seis hombres y una mujer en dos autos, un Renault Clio blanco y un Palio, entraron con armas de fuego a la casa y redujeron a la familia y los empleados: diez personas. Para intimidarlos, efectuaron varios disparos y uno de ellos hirió en la cadera a una joven, hija del dueño. Robaron dinero, celulares, documentación y se fueron en tres autos, dos de la estancia y uno de los que habían usado para llegar allí.
La pesquisa identificó luego a una joven domiciliada en Chubut al 7600, Romina O., como sospechosa, quien firmó el año pasado un abreviado a tres años como partícipe necesaria. En agosto, Ruiz fue imputado por este hecho con otros tres cómplices: Franco R., Víctor “Ponja” M., y el líder de la banda, Sergio “Mono” C, quien fue atrapado en los minutos siguientes al golpe sobre el Banco Credicoop de Roldán, ocurrido el 8 de julio pasado, y está imputado por ese hecho y el robo al Municipal de Empalme.
Uniformes para el Mono
Mientras se leía el fallo contra el Gordo Ruiz, a las 11.50 de ayer, la Policía fue a la cárcel de Piñero por una extraña situación. Un hombre de 36 años había sido retenido por los penitenciarios cuando intentaba ingresar a visitar a Sergio C., el Mono, con un bolso donde tenía 1 chaleco portaobjetos, 3 pantalones de fajina, 1 buzo polar con escudo de la Policía de Santa Fe, 2 camisas y 1 remera, también con la insignia policial. Las fuentes no descartaron que la indumentaria fuera parte de un plan de fuga.
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