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El Ciudadano en Buenos Aires

Aborto: de Rosario al Congreso en busca de derechos

Unas 2 mil mujeres partieron hacia Capital Federal en 35 colectivos. Fueron cuatro horas de viaje donde las edades y las experiencias diferentes palpitaron una jornada histórica sin antecedente. Seguí la cobertura minuto a minuto con enviadas especiales


Es 13 de junio de 2018 y por primera vez el Congreso Nacional argentino debate en el recinto un proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Desde Rosario una caravana de más de 2 mil personas viaja a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a acompañar la ley. La integran mujeres de todas las edades, estudiantes secundarios y universitarios, docentes, integrantes de agrupaciones sociales, políticas y gremiales, periodistas y activistas de distintos colectivos.

La caravana sale de Rosario apenas pasadas las 7. En el trayecto hasta el punto de encuentro de bulevar Oroño y avenida 27 de febrero el taxista que lleva a un grupo cuenta que ya hizo dos viajes hacia el mismo destino y que en el camino cruzó mujeres en casi todas las esquinas. Otra taxista felicita a la pasajera por la lucha y le dice que las mujeres están haciendo una revolución. Los colectivos a lo largo de Oroño llegan hasta Pellegrini. Son 35 y trasladan a más de 2 mil personas.

La mayoría de las que viajan son mujeres, aunque también hay varones que cuentan que van a acompañar. Llegan con mate, gorro, bufanda, bolsa de dormir y mucho abrigo para las 20 horas de vigilia que se vienen.

Foto: Ana Isla – Enviada especial.

 

Silvia Augsburger, integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito y diputada provincial por Igualdad y Participación, recibe sonriente a las que llegan con una pregunta: “¿Están listas para volver con una vergüenza menos y un derecho más?”. Tiene 55 años y cuando fue diputada nacional presentó por primera vez con su firma el proyecto de IVE, en 2007. También fue autora de la ley de matrimonio igualitario y vivió una jornada que le recuerda a este 13 de junio. Junto a las integrantes de la Campaña que desde hace 13 años pelea por el aborto legal están eufóricas. Todas coinciden en que costó dormir la noche anterior.

En los colectivos las chicas chequean portales para ver cómo titulan los medios de comunicación el comienzo de la jornada. Charlan sobre argumentos que escucharon en los últimos días, comentan conversaciones familiares y comparten memes. Cada tanto, entre el sueño y el acelere, empiezan los cánticos feministas que piden la legalización. Una chica lee un chiste en el celular. “Messi, trae el aborto”. Se ríe con las amigas por la alusión a la sanción de la ley como trofeo del mundial feminista.

Foto: Ana Isla – Enviada especial.

También buscan los últimos datos del conteo. “Estamos un voto abajo”, cuenta una chica que no llega a los 25. Comentan los programas de televisión en los que en los últimos días se habló del mensaje inclusivo de los adolescentes que usan la “E”. Sale la conversación sobre los famosos que salieron a apoyar el proyecto. Susana Giménez, como la gran sorpresa. Marcelo Tinelli, como el que siempre queda bien parado. Rial como el machista en deconstrucción al que no se sabe si creerle.

Las generaciones de mujeres se cruzan y se preguntan por cómo vivieron distintos debates en la historia del país. “¿Cómo fue la votación del matrimonio igualitario? ¿Estaba igual de empatado?”, dice una y otra responde que hasta el último momento el marcador daba empate. Recuerdan la marca naranja como multitudinaria y mucho más fuerte que las de quienes se oponen ahora. “Son los mismos sectores que se opusieron a todas las leyes de ampliación de derechos de las mujeres y los colectivos de diversidad”, coinciden. Hablan de qué significa millenial y generación X. Los celulares googlean y dan fechas exactas para que cada una se ubique en un tiempo histórico. Coinciden en el 13 de junio de 2018 las que crecieron con disquete, casete, diario en papel, foto analógica y digital y celular táctil. “Yo que soy de la generación de las certezas les digo que la ley sale”, dice una de las más grandes.

Los colectivos llegan a Capital Federal poco antes de las 12. El debate empezó pasadas las 11.30 y todas lo siguen desde los celulares. Bajan y caminan por la avenida 9 de Julio hasta Corrientes. En el camino cruzan mujeres y varones con pañuelos. También vendedores del triángulo de tela verde. “¿Por qué no se cosen las trompas?”, grita un hombre y una integrante de la caravana recuerda a la integrante de Mala Junta y Ni Una Menos Majo Gerez cuando en el debate de comisiones en el Congreso pidió a los diputados varones que hagan autocrítica y se pregunten cuántas veces googlearon vasectomía o se preocuparon por la anticoncepción.

Los integrantes de la caravana entran a la plaza del Congreso por distintos accesos. La plaza fue dividida en dos con vallas con un corredor central. En Rivadavia están quienes apoyan la legalización. En Yrigoyen los grupos que están en contra de que el aborto sea legal en Argentina. Calle Rivadavia está colmada desde temprano de puestos de comida, venta de merchandising feminista, carpas donde se puede conseguir agua fría y caliente y cargar celulares y seguir la transmisión en vivo. También hay charlas, talleres, debates y reuniones en cada metro que terminan en cánticos. Las integrantes de la Campaña de todo el país se cruzan y se abrazan. A las 14 empieza el festival que seguirá hasta la medianoche con bandas en vivo e intervenciones artísticas. Mientras adentro del reciento las diputadas y diputados argumentan a favor y en contra del proyecto. Del otro lado, la calle Hipólito Yrigoyen aún está semi vacía. La convocatoria contra la ley arranca a las 19.

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