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Audiencia

A dos años del crimen de Maxi Isapi en Empalme Graneros, joven fue imputado y quedó preso

Se trata de un joven que tenía pedido de captura desde mediados de 2018 y fue detenido el martes pasado. Lo acusaron de homicidio agravado y portación ilegal de arma y le dictaron prisión preventiva por el plazo de ley por el crimen de Maximiliano Isapi, quien murió tras recibir un tiro en la cabeza


Maximiliano Isapi tenía 18 años cuando fue asesinado el 6 de mayo de 2018 en Génova y Garzón.

Un joven que era buscado hacía dos años por un asesinato en Empalme Granero fue acusado esta semana y quedó detenido por el plazo de ley. La audiencia imputativa se realizó este jueves al mediodía por videoconferencia ante la jueza María Melania Carrara, quien aceptó la calificación legal del fiscal Alejandro Ferlazzo por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real y portación ilegal de arma de guerra.

De esa manera, Fernando José O., de 26 años, quedó formalmente acusado de matar de un tiro en la cabeza a Maximiliano Isapi, de 18 años, la madrugada del domingo 6 de mayo de 2018 en Génova y Garzón. Malherido, el joven fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) donde murió al día siguiente de ingresar.

Según el fiscal, el acusado estaba acompañado de otras personas y discutía frente a un quiosco de Génova al 2500 con un familiar de Isapi, quien en esos momentos llegó en moto y recibió un balazo en la cabeza.

Su detención se concretó el martes pasado en un domicilio de Donado al 1200 bis en el marco de un operativo realizado por personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) con colaboración de su pares del grupo Táctico de Infatería (Giri).

Según contó el entorno de la víctima apenas lo balearon, Maximiliano no tenía problemas con nadie pero sufría los hostigamientos de un grupo de pibes que se juntaban en una de las esquinas de su barrio en Empalme Graneros.

Maximiliano no tenía anotaciones penales ni conflictos conocidos por su familia. Trabajaba con su padre y el año que lo asesinaron había dejado la escuela para colaborar en su casa.

Esa madrugada, el muchacho llegó en moto a la esquina de Garzón y Génova con su prima, iban a comprar una cerveza al quiosco cuando, desde otra moto y un auto, los atacantes le dispararon. Desde su entorno sólo esgrimieron que “lo habían amenazado unos pibes de una bandita” que solía juntarse en Cullen al 1300 bis y que tenían a mal traer a varios vecinos del barrio.

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