“La América aún no estaba en disposición de recibir dos grandes bienes, la libertad e independencia; en fin, mi amigo, espero en usted un compañero que me ilustre, que me ayude y quien conozca en mí la sencillez de mi trato y la pureza de mis intenciones”, le expresó Manuel Belgrano (Lynch, 2012) a José de San Martín antes del encuentro entre los dos generales de la guerra de la Independencia. El primero, un civil y militante político de las jornadas de Mayo, estaba en retirada y, derrotado al frente del Ejército del Norte, le iba a traspasar el mando al ascendente y experimentado militar ex soldado español que ya tramaba una nueva estrategia para ese conflicto bélico. El encuentro se produjo, más allá de los debates banales, en la Posta de Yatasto durante enero de 1814. El gran jefe elaboró un plan que, ante la imposibilidad del avance por el Altiplano, eligió cruzar los Andes para avanzar hacia Chile y posteriormente llegar a Perú. Para contener a las fuerzas realistas, Miguel Martín de Güemes organizó una guerra de guerrillas con sus gauchos logrando mantener a raya y hostigar a los españoles.
Los tres demostraron sus cualidades humanas. Belgrano supo tener la humildad suficiente para reconocer sus límites en el desempeño militar pero continuó con sus actividades políticas que lo habían llevado a ponerse el uniforme. San Martín pudo desarrollar su estrategia y su brillantez militar aunque nunca puso por encima sus ambiciones personales ni empuñó sus armas contra sus compatriotas. Güemes demostró que se puede luchar desde abajo aunque luego fue postergado por los poderes locales.
El “Encuentro de Yatasto”, entonces, se presenta como un punto importante en la historia y en las experiencias personales de esos próceres argentinos.
Para mantener vivo aquel encuentro entre grandes, pero también a modo de homenaje por su lucha y sus convicciones, este año la provincia de Salta decidió conmemorar el Bicentenario del Encuentro de Yatasto entre los Padres de la Patria con un feriado provincial este lunes 20 de enero.
¿Por qué Yatasto?
La célebre Posta de Yatasto, donde se mantuvo el encuentro, es una finca o posta situada junto al río homónimo que, ubicada en la región sur de la provincia de Salta (cerca de la localidad San José de Metán) perteneció al Camino real, es decir, la ruta de transporte en carretas utilizada en la época colonial para el transporte de mercaderías desde Buenos Aires hasta Potosí.
La posada servía de descanso para los viajeros y como lugar de recambio de cabalgaduras o aprovisionamiento. Fue construida a fines del siglo XVII y perteneció al coronel Vicente Toledo Pimentel, quien adhirió a la causa de la Revolución de Mayo y la entregó a los patriotas, además de contribuir con 1.300 caballos y 100 vacas cuando la fuerza era conducida por el general Juan Ramón Balcarce.
El lugar, al igual que otras postas vecinas, fue utilizado como cuartel del norte en el que se hicieron cambios de mando, por ejemplo cuando Juan Martín de Pueyrredón fue reemplazado por el general Manuel Belgrano como jefe del Ejército del Norte el 26 de marzo de 1812 y más tarde, en 1814, cuando se realizó el célebre encuentro en el que Belgrano traspasaba ese mismo mando de las casi aniquiladas huestes argentinas derrotadas en Ayohuma a San Martín.
Entre los historiadores existe un largo debate sobre la fecha, sobre si fue el 17, el 20 o el 30 de enero; además del lugar.
Algunos proponen que en realidad el encuentro fue en la posta Algarrobos. Lo cierto es que ese desvarío no suma ni quita nada al acontecimiento ni a la experiencia y personalidad de los actores que allí intervinieron. Sí importa, que al mes siguiente allí Güemes hizo su juramento de retener a los realistas.
Distintos rumbos
Luego del célebre encuentro, Belgrano dejó su actividad militar pero no la política. Se embanderó con la causa de una monarquía parlamentaria como futuro de las Provincias Unidas del Sur y esa moción llevó al Congreso de Tucumán, que declaró la Independencia el 9 de julio de 1916.
San Martín tomó el mando del Ejército pero lo trasladó a Mendoza, desde donde organizó la mayor operación bélica de la guerra independentista. Allí formó el Ejército de los Andes, cruzó junto a sus hombres la cordillera para liberar Chile y posteriormente Perú. Dejó luego su mando a Simón Bolívar en otro célebre encuentro en Guayaquil, se negó a reprimir luego a sus compatriotas y partió a París donde se dedicó a la educación de su hija, sin ambiciones, dejando la grandeza en América. Güemes cumplió su compromiso, armó a los gauchos salteños y acosó a los realistas, que no pudieron retomar la región que fue escenario de guerra por un largo lustro más.
Actos de memoria
Desde hace unos días se iniciaron los actos de memoria en la localidad de San José de Metán, donde inauguraron una plazoleta con los bustos de los tres próceres, según el sitio web El Intransigente.com
En Salta se conformó una Comisión especial que se encarga de la Década Bicentenaria 2006-2016. El coordinador general de esa comisión, Alberto Barros, explicó que la plazoleta que se inauguró “constituye no sólo el primer y único espacio público en todo el país y en América donde se rinde homenaje a los tres hombres más grandes de la historia de nuestra Independencia, sino que quiere ser la síntesis del encuentro que todos los argentinos anhelamos para la construcción de una patria más justa, más igualitaria e inclusiva”.
Ante la conmemoración, el secretario de gobierno de Salta, Néstor Ruiz de los Llanos, afirmó: “Mirando los rostros de estos grandes hombres de nuestra historia que supieron anteponer todo interés particular, todo celo o toda envidia a los intereses superiores de la Patria naciente, todos los salteños debemos tomar conciencia de que es el servicio a los más desposeídos la tarea que hoy nos reclama nuestra Patria para lograr mayor inclusión, más justicia y más igualdad de oportunidades”.
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