Orientados a esclarecer hechos de abusos de armas y descomprimir la violencia que aqueja a un sector de la zona norte por la disputa entre bandas antagónicas, investigadores de la Fiscalía junto a uniformados de la seccional 10ª hicieron este jueves dos nuevos allanamientos: en Ghiraldo al 1900 y Ávalos al 1800, dos puntos rojos en el mapa de calor de barrio Casiano Casas. Los procedimientos se sumaron a la decena de irrupciones por parte de la misma comisaría ocurridas a principios de enero. En esta ocasión un joven quedó detenido y luego fue imputado en el Centro de Justicia Penal por tenencia de arma. También en otro procedimiento, un muchacho apodado Primo quedó preso acusado de tirotear casas y personas, indicaron fuentes judiciales, quienes hicieron un repaso de los imputados hasta el momento.
El conflicto, atravesado por las disputas por el control del territorio para la venta de drogas al menudeo y las venganzas interpersonales en los barrios El Churrasco (La Esperanza), Parque Casas y La Cerámica, acarrea por lo menos dos años y tiene como hitos –señalan investigadores– el crimen de la niña de 5 años, Maite Ponce en julio de 2018; los homicidios de los primos Nicolás Coceres y Mauro Barrionuevo también en ese año. Estos crímenes se sumaron al triple homicidio de octubre del año pasado en la casona de Pago Largo al 600 donde murió Emanuel “Ema Pimpi” Sandoval, Gastón Saldaño, Rocío Genovese y dejó a otro amigo malherido. Luego hubo varias balaceras e incluso intentos de usurpación, que pusieron otra vez sobre el tapete las disputas entre personajes del hampa de zona norte.
Nuevos allanamientos e imputaciones
El jueves por la noche el personal de la 10ª a pedido del fiscal de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos Matías Edery allanó dos viviendas; una de ellas, en Ávalos y Larrechea, es en donde el 4 de julio de 2018 fue asesinada Maite Ponce por un disparo que tenía como blanco la fachada de la casa. Esta vivienda volvió a la crónica policial el 13 de enero pasado cuando desconocidos volvieron a disparar contra el frente. Uno de los proyectiles traspasó la puerta y rozó cerca del ojo y el pie a un nene de tan sólo 8 años, según denunció la familia en los medios de comunicación.
En esa casa, los policías secuestraron un revólver calibre 22, celulares y elementos de interés para la causa, indicaron los voceros policiales para agregar que de un total de tres demorados, un joven de 23 años identificado como Matías Hugo F. quedó imputado este viernes por tenencia ilegal de arma de fuego y quedó preso por 60 días en forma preventiva, señalaron fuentes del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
También fue imputado Rodrigo Alejandro F., de 25 años y conocido como Primo, quien había sido detenido el miércoles pasado por personal policial en Uriarte y Esquivel. Según investigadores, Primo estaba sindicado por tiroteos y robos. Este viernes quedó preso por el plazo de ley, dijeron desde el MPA.
A Primo, los detectives lo consideran la mano derecha de Elías Ezequiel C., de 23 años, un muchacho detenido con una pistola calibre 9 milímetros el sábado pasado en Miller y Ghiraldo. Para los investigadores este joven es el padre de la niña Maite Ponce y lo definieron como “un pibe que empezó a los tiros desde que mataron a su hija y a su amigo Nicolás Coceres”. Elías fue imputado por el fiscal Edery el pasado miércoles: le achacaron portación de arma de fuego y el intento de robo de una moto cometido el 16 de diciembre pasado en Casiano Casas y Cavia, en el que la víctima recibió un tiro en una pierna, señalaron desde la Fiscalía.
A este muchacho lo ubican como uno de los antagonistas de los allegados al fallecido Ema Pimpi, entre ellos su hermano Nono Sandoval y las filas de la llamada banda de Tania R., conocida en las barriadas de Parque Casas, El Churrasco y Nuevo Alberdi.
Del otro lado del paño los detectives señalan a los tiratiros al mando de un joven identificado como Fabricio, de un conocido clan del extremo norte: los Romero, cuyos integrantes están sindicados en múltiples investigaciones por hechos de violencia, robos y usurpaciones en Nuevo Alberdi.
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