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Apelación en Tribunales

Juicio Perassi: pidieron perpetua para Strumia y los otros tres civiles

La Fiscalía y la querella reiteraron el pedido de prisión perpetua para el cuarteto de civiles acusados en el caso. Subsidiariamente plantearon una condena temporal de 25 años de cárcel, donde la querella incluyó a Daniel Puyol, uno de los policías


Foto: Franco Trovato Fuoco.

En la segunda jornada de apelación de la sentencia que absolvió a nueve personas en la causa Paula Perassi, la parte acusadora terminó este miércoles con las quejas respecto a la valoración de las pruebas de los cuatro acusados por los delitos de privación ilegítima de la libertad y aborto no consentido seguido de muerte. Durante la tarde se ocupó de cuestionar el tratamiento del material probatorio vinculado a la pata policial y ambas partes -tanto la querella y la Fiscalía- mantuvieron sus pedidos de pena. Para el primer grupo la acusación resaltó que la plataforma fáctica abarca la calificación legal que eligieron y mantuvieron el pedido de pena de prisión perpetua para Gabriel Strumia, su esposa Roxana Michl, el chofer Antonio Díaz y Mirta Ruñisky, sindicada por la acusación como la mujer que practicó el aborto a Paula Perassi. Pero para el caso de que el tribunal de Cámara entienda -como lo expresó el tribunal de primera instancia- que las figuras privación de la libertad seguida de homicidio y el aborto no consentido seguido de muerte se contraponen porque en la primera la muerte es dolosa y en la segunda preterintencional, subsidiariamente plantearon un pedido de pena de 25 años.

En la primera jornada, la acusación representada por María Eugenia Iribarren habló de las cuestiones más generales del caso, donde resaltó la falta de evaluación integral de la prueba indiciaria por parte del Tribunal de primera instancia, la falta de perspectiva de género al analizar el caso y la particularidad de que se trató de un hecho donde no se encontró el cuerpo de Paula. Luego se dedicó a cuestionar el tratamiento del caso que el tribunal a cargo de las juezas Griselda Strólogo, Mariel Minetti junto el magistrado Álvaro Campos hicieron en la sentencia.

Este miércoles, los planteos abundaron sobre el plan criminal pergeñado para sacar a Paula de su casa, privarla de su libertad y someterla a un aborto no consentido del que participaron Strumia, Michl, Díaz y Ruñisky, según explicó la acusación. Iribarren se refirió al encuentro en el Viejo Bar de Timbúes la tarde de la desaparición de Paula, quien se había arrepentido el día previo a hacerse un aborto y remarcó que el mozo del bar declaró que vio a Paula con dos hombres poco antes de las 18: uno era Díaz mientras que el otro era Strumia, al cual reconoció en una rueda de personas.

La antena de Timbúes tomó el celular de Paula aquella tarde y hubo una llamada a su teléfono desde el fijo de Strumia, contaron. Para la acusación hablaba con Michl. Hubo perros rastreadores que a los tres meses descubrieron concentración de rastros de Paula en el baño del bar y en el auto de Díaz, explicaron.

Tanto la Fiscalía como la querella, representada por Adrián Ruiz y José Ferrara, cuestionaron que el tribunal descreyó del testimonio del mozo, que en ese entonces tenía 15 años y lo carearon con Díaz durante la instrucción. Además, resaltaron que el adolescente luego sufrió amenazas. En juicio, el mozo avaló sus primeros dichos pero le dieron sustento a la coartada de Díaz, que primero dijo que no se acordaba que había hecho ese día en una primera oportunidad y luego contó que estuvo festejando por adelantado el cumpleaños de un amigo en la ciudad de Totoras.

En cuanto a la participación de Michl, la acusación dijo que fue parte del plan. Aseguró que la pareja de Strumia habló esa tarde con Paula cuando estaba en el bar y la noche de la desaparición, entre las 21 y las 22, llamó 21 veces a su marido y descartaron la teoría de que llamaba para ubicar el celular de su esposo. Dijeron que intentó desviar la investigación en varias oportunidades haciendo creer que Paula estaba viva.

Cuando se intervino su teléfono fijo, una voz de mujer gritó “auxilio, auxilio” mientras se escuchaba el tono del teléfono. Si bien no se pudo peritar esa grabación, los Perassi dijeron que era la voz de Michl. También hicieron referencia a la declaración del hijo de Strumia, el cual aseguró haber visto en noviembre de 2011 a Paula en la parada del colectivo cuando iba a buscar su boletín de calificaciones, cuando ella fue vista por última vez el 18 de septiembre de ese año. La Fiscalía dijo que esto fue desvirtuado por una investigación posterior.

Otra de las pruebas que destacó fue la coartada del matrimonio Strumia. Dijeron que la noche de la desaparición de Paula fueron a comer con una pareja amiga a un bar. “Entre las 22 y las 23 prepararon una coartada mediante comunicaciones telefónicas con el matrimonio amigo mientras Paula perdía la vida”, sentenció el querellante Ruiz.

Además, tanto la querella como la Fiscalía sumaron que entre el 22 y el 23 de septiembre, Michl mantuvo comunicaciones con el entonces jefe de la Unidad Cuerpos de San Lorenzo, Daniel Puyol, cuando Strumia fue detenido la primera vez. Puyol fue acusado en el caso. El querellante José Ferrara dijo que una de las pocas ocasiones donde Michl expresó algo en las audiencias orales y públicas, aún cuando no estaba imputado su esposo, dijo que perdió camiones de su propiedad. “Eso demuestra a las claras como este plan criminal fue orquestado y sostenido económicamente”, señaló.

El aborto

Desde la acusación contaron que hasta el 2014 no surgió la teoría del aborto seguido de muerte. Se desconocía la existencia de Mirta Ruñisky, la mujer acusada de hacerle una práctica abortiva a Paula. Esta versión llegó a Alberto Perassi por una abogada que tenía como cliente a un yerno de Ruñisky. Sin embargo, en el juicio oral ese hombre se amparó en el secreto profesional, explicaron.

Dijeron que esa versión esta corroborada por evidencia objetiva, como las pastillas de oxaprost que se encontraron en la casa de la mujer varios años después, vencidas y camufladas en un tarro de crema. La mujer vive en Timbúes donde se produjo el encuentro de Paula con Strumia y Díaz, lugar en el que residía el chofer.

En el debate oral de primera instancia, citaron el testimonio de otro yerno de Ruñisky, quien declaró en varias oportunidades, pidieron al tribunal que vean el video de la audiencia “donde van a encontrar puntos esclarecedores como que su suegra practicó abortos y usaba oxaprost”, explicaron.

Además, reiteraron el pedido de pena a prisión perpetua para el cuarteto y solicitaron una sanción en forma subsidiaria de 25 años. La querella hizo una distinción en este punto e incluyó al policía Daniel Puyol en esta acusación. Este jueves seguirán las defensas con sus exposiciones.

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