Gremiales

Un conflicto sin final

Interventores solicitaron al juez la quiebra de Oil

El pedido recayó sobre el magistrado comercial Javier Cosentino, quien entiende en el concurso preventivo de la Refinería San Lorenzo. La próxima semana trabajadores y representantes sindicales solicitarán la continuidad productiva y laboral de la refinería en un cónclave con el juez


Los interventores de Oil Combustibles solicitaron la quiebra de la refinería San Lorenzo al juez comercial Javier Cosentino, quien entiende en el concurso preventivo de la empresa. La notificación llegó este miércoles por la mañana a la sede gremial del Sindicato Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos (Supeh), según confirmó el secretario de asuntos legales, Héctor Brizuela.

Este miércoles, trabajadores y representantes sindicales volvieron a visibilizar el conflicto que atraviesa la refinería de San Lorenzo, desarrollando una volanteada e instalando una carpa en la Esquina de los Bancos. El jueves de la próxima semana, participarán de dos reuniones definitorias.

La primera será a partir de las 10.30 en Capital Federal, en la que solicitarán la continuidad productiva y laboral de la refinería en un cónclave con el juez Cosentino, los tres interventores y funcionarios de la Afip. Y la segunda reunión se llevará a cabo a las 17 en el Ministerio de Trabajo de la Nación.

“Los interventores presentaron un escrito judicial, solicitando al juez que decrete la quiebra de la refinería con lo que ello implica”, anunció Brizuela. “A la audiencia definitoria del jueves 5 iremos con la misión y con el pedido de todos los trabajadores de que el juez nos asegure la continuidad de la empresa en marcha”, reclamó el sindicalista.

En la audiencia del pasado lunes, la Afip rechazó cualquier tipo de moratoria o facilidad de pago por la deuda que Oil Combustibles contrajo con el organismo de recaudación fiscal en concepto de Impuesto a las Transferencias de Combustibles (ITC).

“Todo indica que el juez decretará la quiebra porque no hay más fondos ni siquiera para atender los gastos fijos”, lamentó Brizuela. “Ante una quiebra, lo que tenemos que hacer las organizaciones sindicales y los trabajadores es garantizar los puestos laborales. Ya bastante daño será perder las indemnizaciones y la antigüedad. Exigiremos al juez la puesta en marcha y la continuidad de la unidad productiva, porque todos los interesados ven el negocio en el muelle y en la planta de despacho”, advirtió el secretario de asuntos legales del Supeh.

A partir del 1º de enero, a través de la quita de los impuestos de importación al crudo y sus derivados, en el mercado petrolero se podrán importar productos cada vez más baratos de Estados Unidos y así venderlos a un costo superior en el mercado interno. “Los interesados en adquirir la refinería tienen que comprar el total de la unidad productiva, con la empresa en marcha y los trabajadores adentro”, insistió Brizuela.

En medio de la crisis de la refinería, cien estaciones de servicio pidieron la desvinculación de la red de Oil Combustibles. “Se están abasteciendo con mayoristas de banderas blancas: Shell y Axion Energy. Alguien se los está permitiendo”, insistió el gremialista.

A fines de la semana pasada, los interventores de Oil Combustibles garantizaron el pago de sueldos del mes de marzo para los trabajadores, a través de un depósito bancario para los primeros días de abril.

“Por supuesto que la refinería es un negocio rentable”, aseguró Brizuela. “A algunos les ha permitido evadir 8.000 millones de pesos. A otros 1.100 millones en apenas 4 meses. Tenemos una de las tres plantas de asfalto del país, con la demanda récord que hay en el sector. Vaya si no es rentable. Esa es la postura que vamos a mantener los trabajadores. Esto no es un negocio, es un negoción”, finalizó.