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Calendario electoral con lecturas según cada cual

Ya hubo 9 elecciones provinciales: en las primeras ganó el oficialismo, que perdió feo en las últimas.

En lo que va del año, ya se realizaron las elecciones locales en nueve provincias y en la ciudad autónoma de Buenos Aires. El calendario electoral, que arrancó en febrero, terminará el 23 de octubre siempre y cuando no haya balotaje en las presidenciales. En las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias de hoy se empezará a definir el escenario de octubre, aunque los porcentajes variarán por voluntad de los electores y por la mayor afluencia de votantes que se espera para las generales.

En la primera mitad del año hubo elecciones en Catamarca, Chubut, Salta, La Rioja, Neuquén, Misiones y Tierra del Fuego; en todos los casos se impusieron candidatos afines al kirchnerismo –por ejemplo, la reelección de Juan Manuel Urtubey en Salta–, aunque muchos de ellos no forman parte orgánicamente de ese espacio, como la gobernadora reelecta de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos.

Esa seguidilla de resultados favorables al gobierno nacional le dio forma a la estrategia electoral de “los invencibles”, mediante la cual se intentó instalar la idea de que Cristina Fernández de Kirchner ya tiene asegurada su reelección. Las salidas de Mauricio Macri y de Fernando “Pino” Solanas de la grilla de presidenciables, además de las alianzas tejidas por los diferentes sectores de la oposición, contribuyeron a ese clima triunfalista que caracterizó la campaña kirchnerista.

Sumado el padrón de Catamarca, Chubut, Salta, La Rioja, Neuquén, Misiones y Tierra del Fuego, representa apenas el 10 por ciento del total nacional. La segunda parte del cronograma electoral fue la contracara de la primera: en las provincias de Santa Fe y Córdoba y en la ciudad de Buenos Aires el kirchnerismo perdió feo. En Córdoba ni siquiera hubo “candidato del gobierno nacional”. Esos resultados entusiasmaron al arco opositor: entre los tres distritos suman el 25 por ciento del padrón nacional.

No obstante, si se compara el escenario 2011 con las legislativas de 2009, el oficialismo nacional creció en aquellos territorios que le son más esquivos. Agustín Rossi logró más del doble de votos: pasó el 10 al 22 por ciento. Lo mismo ocurrió en la ciudad de Buenos Aires: del 11 por ciento de 2009 al 35 por ciento logrado por Daniel Filmus –un candidato expresamente apoyado por la presidenta– en el balotaje contra el reelecto jefe de gobierno Mauricio Macri.

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