Policiales

Crimen del Ema Pimpi

100 mil seguidores en el Instagram y una tobillera electrónica

Ema Pimpi publicaba en las redes su nueva vida como productor musical. Los videos se grababan en la casa que alquilaba, que es de un juez, cuyo contrato está a nombre de un amigo del Ema que es hijo del titular de un radio taxi.


Fotos: Franco Trovato Fuoco

Ema Pimpi Sandoval quería dejar atrás su pasado. De ser un habitué de la crónica policial en el primer lustro de la década pasó a tener 100 mil seguidores en su cuenta de Instagram por su actividad como productor musical de artistas locales del género reggaetón y trap. En la mansión donde cumplía prisión domiciliaria había montado un estudio de grabación y allí hacía videos promocionales de su sello EMGroup. El propietario de la vivienda es el juez civil Oscar Raúl Puccinelli, que desde Costa Rica se comunicó con la prensa local para negar vínculo alguno con los inquilinos y aclarar que el alquiler lo gestionó la inmobiliaria STI.

El contrato de alquiler estaba a nombre de Matías Lange, un amigo de Ema Pimpi. Su padre, Fernando Lange, es uno de los referentes de la Cámara de Radiotaxi de Rosario. Mostrando un desconcierto similar al del magistrado, dijo haberse enterado por la mañana su relación con el contrato, y salió a limpiar su nombre: “¿Quién fue garantía de él (su hijo Matías) si no tiene ni recibo de sueldo ni trabaja? La inmobiliaria deberá dar explicaciones. Deberían haberse comunicado conmigo para ver si eran fehacientes los datos. Lo del contrato me enteré hoy. Jamás vino alguien a mi casa; ninguna inmobiliaria llamó pidiendo referencias de Matías”. Desde STI lo cruzaron: Mariano Mortelano, titular de la inmobiliaria, aseveró que Lange y su esposa son los garantes del contrato.

Lo cierto es que un tosco cartel que contrasta con los arreglos suntuosos del inmueble dice: “Pago Largo 654 flia Lange”.

Como si no fueran suficientes versiones sobre la mansión, otro rumor de tintes conspirativos sobrevoló la jornada. El hermano del juez Puccinelli es Claudio, un abogado penalista que participó del equipo jurídico de Héctor Superti, letrado querellante en la causa que tuvo como víctima al ex gobernador Antonio Bonfatti por el tiroteo que sufrió su vivienda de barrio Alberdi en 2013. En ese expediente terminó condenado el propio Sandoval quien a todo esto no estaba claro si realmente era el destinatario del ataque que sufrió en la madrugada de este viernes. Sin embargo varias fuentes aseguran que los hermanos hace tiempo que no tienen relación, algo que también aseguró Oscar Puccinelli desde Costa Rica.

El abogado de Ema Pimpi, Fausto Yrure, aseguró a LT8 que la situación de su cliente era legal y no violó la prisión domiciliaria: “Sandoval hacía más de un año que estaba bajo ese método de vigilancia y realmente lo cumplía perfectamente, hasta donde yo sé había montado un estudio de grabación en la casa. La única causa que mantenía es por el hecho que está calificado como tentativa de homicidio y en estos momentos estábamos esperando fecha de audiencia de juicio oral y público; él estaba convencido de demostrar que era ajeno al hecho”.

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