Edición Impresa

“El dolor estará mucho tiempo”

“Los hinchas saben que dejo la vida por esta camiseta”, reconoció el Mono.

José Odisio (desde Mar del Plata)

El dolor estará siempre presente. Los recuerdos muchas veces serán perturbadores y traerán inevitablemente tristeza. Y no faltarán aquellos que lanzarán palabras hostiles que le partirán el alma como una puñalada certera. Juan Leandro Quiroga vive horas difíciles. Su fatídica actuación en la dolorosa derrota ante San Lorenzo lo perseguirá por mucho tiempo.

Y el fútbol, tan cruel como la vida misma, se lo recordará una y otra vez. Sereno, reflexivo, pero también angustiado y lleno de incertidumbres, el Mono se sentó a charlar con El Hincha y más allá de pedirle disculpas a los hinchas leprosos, dejó en claro que no tiene nada para reprocharse. “En la cancha nunca me guardé nada. Es cierto que tuve una tarde terrible, pero estoy seguro que los hinchas me van a perdonar porque saben que siempre di todo por esta camiseta”, señaló en el arranque del diálogo.

— ¿Cómo estás anímicamente ahora que pasaron algunas semanas de aquella fatídica tarde?

—Uno trata de concentrarse en la pretemporada. Pero el dolor queda, está adentro y lo va a estar por mucho tiempo. Hay un sabor amargo que uno no se puede sacar. Pero hay que mirar hacia adelante y volver a creer.

— ¿Analizaste qué te pasó esa tarde?

—Me sorprendió jugar tan mal. Uno puede tener tardes malas, pero yo venía muy bien y estaba muy confiado. No tengo explicación. Sinceramente no pude estar un día de mis vacaciones sin pensar en ese partido. Y hoy todavía se me cruzan las imágenes. Y si bien no me puedo reprochar nada, el dolor queda y tengo una deuda conmigo mismo que en algún momento trataré de saldar.

— ¿Tu dolor tiene que ver sólo con el título perdido o también te inquieta lo que pueda pasar con los hinchas?

—Mi sueño era salir campeón con Newell’s. Creía fervientemente que lo podía lograr. Estar tan cerca y dejarlo escapar… es duro. Y al hincha no le puedo decir nada. Ellos están tan dolidos como nosotros y si no me perdonan esa mala tarde que tuve los entenderé. De todas maneras ellos saben bien que cada vez que me puse la camiseta de Newell’s lo hice con orgullo y di todo lo que tenía. Y lo seguiré haciendo pase lo que pase.

— ¿Tenés miedo de cómo te reciban?

—Miedo no tengo. Yo estoy tranquilo porque siempre me entregué al máximo por esta camiseta. Si alguno siente que no es así lo entenderé. Pero creo que la única manera de recuperar la confianza de la gente es adentro de la cancha.

— ¿Creés que el fútbol da revancha o es una frase hecha?

—El campeonato ya se perdió. Es imposible volver atrás. Lo que hagamos de acá en adelante será proponernos nuevos objetivos para tratar de calmar el dolor. Ojalá podamos volver a pelear cosas importantes. Pero nada de lo que hagamos nos dará el título que se nos escapó. Lo importante es aprender de los errores para seguir creciendo, no para bajar los brazos.

— ¿Jugar la Copa Libertadores puede ser un buen paliativo para el dolor?

—Sin dudas. Es un torneo importante y trataremos de estar a la altura de las circunstancias para darle algo a la gente. Newell’s es un club grande que merece jugar la Copa. Pero debemos demostrar porqué llegamos hasta acá.

—¿Te reprochás algo?

—No puedo reprocharme nada. En la vida siempre fui de frente y en la cancha siempre di todo lo que tenía. Nunca me guardé nada. La gente puede estar dolida o molesta, pero estoy seguro que saben que por esta camiseta doy la vida. Ojalá lo entiendan así.

Comentarios