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Bajo las estrellas

Vínculo orgánico con las canciones

El escenario se expande con los proyectos de Mercedes Borrell y Pol Nada. Desde las 21.30, en La Terraza de Plataforma Lavardén.


Las noches de verano se disfrutan mejor en La Terraza de la Cúpula de Plataforma Lavardén (Sarmiento y Mendoza), escenario bajo las estrellas hasta donde llegarán, esta noche, a las 21.30, Mercedes Borrell y Pol Nada, dos proyectos que con sus particulares búsquedas musicales apuestan, cada uno, por la canción de autor.

Luego de la exitosa presentación de su primer trabajo, Mercedes Borrell vuelve para interpretar los temas de Como el resto de la gente. Y lo hará acompañada por Julián Venegas (guitarra y coros), Carlo Seminara (percusión) e invitados.

Por su parte Pol Nada es el proyecto musical que conduce Pablo Jacobo quien, con tres discos editados (Querés estar solo, He estado en varios lugares a la vez, Te vamos a salvar), estará haciendo un repaso de sus canciones junto a Diego Fusaro (guitarras), Julián Ribero (batería) y Ezequiel Fructuoso (bajo).

Ella psicóloga, él psiquiatra, en sus canciones los músicos comparten ciertas búsquedas que refieren a una generación: la de los nacidos en los albores de los 80. Y, desde allí, plantean sus interrogantes que, mayormente, tienen que ver con temáticas como los sentimientos, estados de ánimo e ilusiones de la vida.

En la obra de Borrell, el amor, las pasiones y la música dialogan con preguntas por la configuración de la realidad, el tiempo y la forma de tratar de comprender cosas universales.

Jacobo, por su parte, ahonda en una estructura que, en una apuesta casi filosófica que roza con ciertas preguntas de la psicología, se interpela sobre la dialéctica entre lo real y la realidad; por una realidad proyectada que emociona pero que no es real.

A partir de una voz suave y delicada, Mercedes Borrel rescata en su primer disco el valor de lo simple y le da un sentido épico. Se hace eco de las cotidianeidades de todos y por escuetas que parezcan les reconoce su valor de plataforma, la importancia, y el sentido que ellas tienen para hacer grande la propia humanidad, enriquecer y llenar de contenido y sensibilidad a la vida. Y lo consigue –en cuanto a lo estrictamente musical– desde una sonoridad orgánica que juega con estilos y ritmos como la bosanova y el folclore.

“Es un disco con el que intenté ser honesta en el decir, en cómo me expreso. No usé en mis canciones una forma de expresar que no uso en mi vida cotidiana”, supo decir Borrell a El Ciudadano, en momentos de dar a conocer Como el resto de la gente.

Querés estar solo, primer disco de Jacobo, buceaba sobre una especie de pop experimental que se alejaba del sonido más liviano o de industria prefabricada. Su último material  se escucha más clásico y orgánico y, según opinó el músico –en diálogo con este medio en momentos de estrenarlo– “las canciones no siguen un patrón rígido sino que se mueven para todos lados”.

Coproducido junto a Tweety González y con la participación de Natalia Lafourcade, Mariano Domínguez y Ulises Butrón, entre otros artistas, lo último de Pol Nada transcurre en un territorio de sonoridad pop donde lo acústico y electrónico se encuentra orgánicamente. A nivel de contenido el álbum no da respuestas sino que busca que el oyente se haga preguntas. “Creo que no tenemos que proyectar tanto hacia el futuro y poder estar exactamente en el momento concreto en que estamos viviendo”.

Cantante y compositora, en su primer disco Borrell plasma una serie de canciones que se sienten emergiendo con vitalidad y donde la escritura aparece como forma de entender o tratar de configurar la propia realidad: “Al escribir canciones, todas esas cosas que pasaban por mi cabeza, esas preguntas íntimas que me hacía –donde cada tanto aparecían algunas respuestas o reflexiones– quedaban plasmadas. Por un lado debo decir que la música ocupa mucho en mi vida pero el escribir canciones refleja un pedacito de lo que es mi actividad, mi pensamiento. Soy una persona muy observadora a quien la cabeza le trabaja bastante”, supo confesar.

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