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Cena accidentada

Veloz asalto nocturno al comedor del club Horizonte

Tres hombres armados se hicieron con el dinero de la recaudación y optaron por no robarles a los comensales.


“Flaco, están choreando”, le gritaron unos comensales al mozo anteanoche mientras señalaban al muchacho grandote de gorrita que escarbaba la caja registradora en el comedor del club Horizonte, ubicado en Suipacha al 1300. El ladrón estaba con otros dos, quienes se encargaron de amenazar con pistolas a los clientes para darle tiempo a su cómplice a que terminara de llenar los tres bolsos con el dinero de la recaudación, cuyo total estiman en 10 mil pesos. El trío huyó a bordo de dos motos, sin tocar las pertenencias de los clientes.

Los tres salones que tiene el comedor del club Horizonte están dispuestos en L. La entrada al club es un portón de rejas que da ingreso al patio, hay un salón donde está la cocina que cuenta con ventanas en su lateral con vista a ese patio; ese sector se comunica con la oficina, que a su vez está conectada con el salón principal: este tiene dos salidas. Como hacía frío, estaban todas las mesas ocupadas adentro y afuera sólo había cinco mesas con clientes. Para comer en el lugar se tiene que hacer una reserva.

El comensal entra a una oficina, anuncia su llegada donde está la caja, franquea otra puerta y pasa al salón techado.

Lisandro, un cliente que fue testigo del asalto, describió ayer en diálogo con El Ciudadano que anteanoche minutos antes de la 1 estaba con amigos en una mesa cerca de la entrada al salón cuando advirtió que un mozo –quien iba con la bandeja cargada a la cocina– detuvo su marcha de golpe porque le cerraron la puerta de la oficina. Otros comensales también notaron la sorpresa del empleado y se pararon para ver qué pasaba.

“Los mozos pasan por la oficina donde están las empleadas y van hasta la cocina. Algunos vieron que el que le cerró la puerta era un muchacho de unos 30 años grandote con gorrita. Nos pusimos a gritar: «Flaco, están choreando». El mozo había quedado descolocado con el portazo”, describió el joven y agregó que con unos clientes tomaron sillas, salieron al patio por la puerta más grande del salón, para así dar la vuelta y reducir al sigiloso asaltante de un sillazo.

Sin embargo, los jóvenes depusieron sus intensiones en el patio porque el ladrón no estaba solo. “Había uno parado en la ventana de la cocina que apuntaba a los cocineros: lo tapaba un árbol. El otro estaba parado en el portón principal. Al vernos se vinieron apuntando. Ahí fue cuando se enteraron los que estaban en las mesas de afuera.
Dejamos las sillas. No robaron a ningún cliente. El que estaba en la caja salió con tres bolsos y se fueron”, describió Lisandro.

A su vez, una vecina contó a los pesquisas que el trío huyó en dos motos y los trascendidos indicaron que la totalidad del botín rondaba los 10 mil pesos.

Entradera en Pérez

Un muchacho de 32 años fue sorprendido anteanoche en la puerta de su casa de la localidad de Pérez por tres asaltantes, quienes sustrajeron electrodomésticos y 4 mil pesos para huir. El hecho se produjo minutos antes de las 22 de anteanoche cuando tres ladrones golpearon la puerta de una vivienda de Chavarini al 500, en Pérez. Cuando la víctima, Mariano Adrián A., de 32 años, abrió la puerta, recibió un empujón y advirtió que lo apuntaban con una pistola. Uno de los asaltantes se quedó con el propietario mientras que los restantes comenzaron a recolectar objetos de valor. Tras amenazarlo de muerte, el dueño de casa entregó 4 mil pesos y los atacantes huyeron en un Chevrolet Astra oscuro.

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