El juez Gustavo Salvador condenó a Jonatan Creciente y René Ungaro a 9 y 13 años de prisión respectivamente. Fue como consecuencia de la unificación de diversas causas que recayeron en su juzgado. Al dúo lo acusaron del ataque que sufrió Matías Pera en noviembre de 2010, y de las amenazas a la hermana del extinto jefe de la barra brava Roberto Pimpi Camino, entre otros.
René Ungaro saltó a las páginas policiales luego del crimen de Roberto “Pimpi” Caminos en marzo de 2010. El joven fue condenado junto a otras dos personas por el crimen. Pero Ungaro contaba con otras causas en trámite que fueron resueltas recientemente por el juez Salvador.
Los hechos
El primero de los delitos endilgados ocurrió el 30 de agosto de 2006, cuando fue detenido durante un procedimiento policial en Garibaldi y Ayacucho y se le secuestró un carnet de conducir apócrifo, por lo que se inició una causa penal. El 20 de octubre de 2008, junto a Gustavo Maximiliano González y una tercera persona, ingresaron armados a una casa de Pasaje Maratón al 1900 y amenazaron al dueño de la propiedad con el fin de sustraer dos motocicletas. La víctima, lejos de amedrentarse, se resistió al atraco y luchó con Ungaro, que disparó en varias oportunidades lesionando al hombre en dos oportunidades con un arma calibre 32 largo. Ungaro fue detenido a las pocas cuadras en un taller mecánico luego de descartar un arma en su huída.
El 8 de octubre de 2009, Néstor Darío Carrizo, René Daniel Ungaro, Ricardo Daniel Carrizo y Jonatan Creciente ingresaron a 4 departamentos de un edificio ubicado en Dorrego 90 y sustrajeron ropa, computadoras portátiles, cámaras fotográficas y dinero, entre otros elementos. Los ruidos provocados por los asaltantes alertaron a uno de los habitantes del lugar que llamó al personal policial, que detuvo al cuarteto de ladrones cuando intentaron escapar.
La amenazas a Rosa Camino
El 27 de abril de 2010 Rosa Caminos y su hijo Rubén César fueron amenazados desde un automóvil con un arma de fuego en Grandoli y Gutiérrez, y perseguidos por varias cuadras por un Peugeot 206. Caminos denunció en forma pormenorizada el hecho e identificó a los agresores sindicando a Cachorra –apodo que se le achaca a Creciente–, y a Ungaro, con quien su hermano Roberto Caminos y su hijo habían tenido problemas. A ello se sumó el testimonio de Rubén Cesar, el de la maestra de la escuela del menor de los hijos de Caminos, quien era llevado al colegio cuando ocurrió el episodio, y la psicóloga del niño, quienes tuvieron conocimiento del hecho por los dichos del pequeño. El juez Salvador condenó a ambos por amenazas calificadas por el uso de arma.
Ataque a Pera
El 21 de noviembre de 2010, en las cercanías de Isola y pasaje Santafesino, Matías Pera caminaba con una guitarra al hombro. En esas circunstancias fue sorprendido por tres hombres. Uno de ellos le dijo: “Esto te lo manda el Panadero por traidor”, y lo baleó con una pistola calibre 7.65. Pera recibió 5 plomos que le provocaron importantes lesiones en el hombro derecho, brazo y codo derecho y región lumbar. Pera reconoció a Cachorra como su agresor y Salvador concluyó que aquella noche Creciente fue el autor de los disparos que hirieron a Pera, por lo que encuadró la conducta en el delito de lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego y portación de arma de guerra
En tanto, el 28 de mayo de 2012, Sebastian C. fue atacado a balazos desde una moto en Uriburu y Colón. La víctima logró escapar pero fue nuevamente atacado en Centeno y Chacabuco donde recibió otros tres proyectiles. Por este hecho fueron señalados Jonatan Creciente y Ariel Acosta, alias “Teletubi”. Ambos fueron señalados por la víctima, quien sostuvo que el enfrentamiento tenía su origen en que el agredido se juntaba con un grupo de personas que tuvo problemas con los agresores en un boliche céntrico, mecánica que fue corroborada por una testigo, por lo que fueron condenados por lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego y portación.
Las condenas
Jonatan Creciente fue condenado a nueve años de prisión por los delitos de tentativa de robo, amenazas calificadas por el uso de arma, lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego y portación ilegal de arma de fuego de uso civil.
En tanto, René Ungaro fue sentenciado a 13 años de cárcel por falsificación de instrumento público, tentativa de robo calificado, por las lesiones causadas y por el uso de arma de fuego; portación ilegal de arma de fuego de uso civil, amenazas calificadas por el uso de arma y el homicidio de Roberto Pimpi Caminos.
En tanto, Gustavo Maximiliano González fue condenado a 3 años de prisión condicional por tentativa de robo. Néstor Darío Carrizo y Ricardo Daniel Carrizo fueron sentenciados a 6 meses de prisión efectiva por el mismo delito, mientras que Ariel Sebastián Acosta deberá purgar 5 años de cárcel por el delito de lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego y portación ilegal de arma de fuego de uso civil. Por último, Vlatko Stipetic deberá purgar 2 años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación especial perpetua para desempeñar la función pública por el delito de cohecho pasivo, puesto que lo encontraron responsable de privilegiar a los acusados durante su detención.
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