Lisandro Olearo
Para los fanáticos del deporte ovalado, pisar la cancha principal de Rugby School se podría comparar únicamente con la sensación que sienten aquellos que visitan los lugares santos de sus respectivas religiones, en una comparación lo más respetuosa posible.
El Hincha fue invitado por la oficina de Marketing del colegio donde estudió William Webb Ellis, persona que según cuenta la leyenda fue el primero en jugar al rugby.
La excursión, que duró un par de horas, comenzó y terminó en la tienda del colegio. Con muchos respeto y observando atentamente cada detalle, caminar el verde césped donde en 1823 Ellis, pupilo del Rugby School y aburrido del partido de fútbol que se estaba desarrollando, tomó la pelota con ambas manos y corrió rumbo a un “ingoal” imaginario para marcar el primer try de la historia.
En 1845 alumnos del colegio registraron ciertas reglas donde se incluyeron términos como off side, touch, maul y knock-on. Ese aspecto fue una ventaja sobre los otros colegios que también jugaban al rugby pero con otras reglas, ya que al registrar y distribuir el reglamento sacaron ventaja. Después, ya en 1871, un total de 21 clubes fundaron la Rugby Football Union en la capital del país.
El colegio fue fundado en 1567 por Laurence Sheryff (verdulero de la Reina Elizabeth I) y fue el principal benefactor, al donar a su muerte tierras en Londres para el mantenimiento de la escuela. Entre algunos de los más famosos ex alumnos se encuentra Lewis Carroll, autor de “Alicia en el país de las Maravillas”.
Actualmente, el Rugby School alberga a 814 estudiantes desde los 13 a los 18 años y en un ochenta por ciento son pupilos (mujeres y varones). Uno de sus directores más famosos fue Thomas Arnold, responsable de la reforma educativa en Inglaterra, quien cautivó al creador de los Juegos Olímpicos, el Barón Pierre de Coubertin, que se inspiró en la reforma encabezada por Arnold, donde se estableció que el deporte forma personas y las bases de la modificación habían nacido en Rugby School.
En el día donde Los Pumas tuvieron libre, El Hincha aprovechó para visitar “tierra santa ovalada”. ¡Amén!
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