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Teatro

Un obrero que está solo y atrincherado

Se conoció una versión de la obra “Desde el andamio”, de Carlos Alsina.


El viernes último, se conoció en la ciudad una versión de la pieza teatral Desde el andamio, del dramaturgo, actor, director y docente teatral tucumano Carlos Alsina, con la actuación de Sergio Casares, bajo la dirección de Alejandro Leguizamón y Pato Maggioni, con la participación de Miguel Sandrigo en carácter de músico invitado.

Desde el andamio (recuerdos, declaraciones e iluminación), que se podrá ver los restantes viernes del mes a partir de las 21.30 en Espacio Bravo (Santiago 150) es un trabajo unipersonal que aborda desde una exploración poética, la actuación, el relato, el teatro de sombras y la música en vivo.

El texto describe la historia de un obrero de la construcción que decidió atrincherarse en su andamio. Desde arriba, mira y observa la realidad, analizando todo lo que sucede abajo y a su alrededor. Allí, lejos de todo problema “terrenal”, sólo le quedan los sueños y los recuerdos. De hecho, el personaje vive en una realidad diferente a la del resto de las personas, que ni siquiera perciben su presencia.

“Muchas preguntas por responder, muchos deseos por concretar, una reconstrucción de su propia vida, de sus recuerdos y de sus emociones que irá transitando paso a paso sin perder el equilibrio, escapando hacia arriba pero sin dejar de mirar abajo”, adelanta el parte de prensa.

Como lo ha hecho con gran parte de su obra, Carlos Alsina, reconocido dramaturgo tucumano nacido en 1958 y de profunda vigencia, ahonda a través de este material una problemática social impregnando su texto de una fuerte impronta poética.

El unipersonal Desde el andamio tuvo su estreno original en 2004, en el Teatro El Pulmón de la ciudad de Tucumán, con la actuación del propio Alsina. En esa primera versión, un albañil ve la vida desde lo alto de un andamio que pende de un edificio. Cree que ha decidido no bajar más aunque en realidad ha sufrido un accidente y aún no ha podido ver su cuerpo estrellado en el piso. Se trata de una metáfora sobre la soledad, el amor, la vida y la muerte, dado que el material apela al humor, a la poesía y a la emoción para representar una historia que excede la experiencia personal.

A la fecha, el también autor de Esperando el lunes tiene en su haber más de cincuenta textos teatrales de los cuales se han representado, hasta el presente, más de cuarenta, tanto en Argentina como en Brasil, España, Italia, Suiza, Ecuador, Cuba, Albania y Puerto Rico, entre otros países.

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