Un poco de oxígeno para Central Córdoba, que sumó de a tres en casa y sigue soñando con evitar lo que sería un inédito descenso a la última categoría del fútbol argentino. Por la 31ª fecha del campeonato de Primera C, el Charrúa metió una importantísima victoria en el Gabino Sosa ante Argentino de Quilmes, que le permitió escaparse a diez puntos del colista Defensores de Cambaceres, que igualó 1-1 en cancha de Midland, pero que aún tiene pendiente un encuentro en cancha de San Martín de Burzaco.
Luego de lo que fue el durísimo traspié 2-0 como visitante ante Berazategui, nada menos que el peor equipo del certamen, el conjunto de Ariel Cuaffaro Russo salió decidido a cambiar de imagen y lo logró gracias a la efectividad que mostró en la primera parte, más la gran tarea del arquerito Matías Giroldi en la etapa complementaria.
Ramiro Rocca adelantó al Matador en el inicio del encuentro, mientras que Diego Migueles, una de las apuestas del DT para este partido, amplió la ventaja un rato antes del descanso. En el segundo tiempo, el Mate salió a apretar mucho más arriba y el Charrúa se contentó con esperar, apoyándose en la muy buena labor de Giroldi, quien reemplazó de la mejor manera al expulsado Leonardo Romero.
La próxima presentación de Central Córdoba será en cancha de Dock Sud, antepenúltimo en la tabla.
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